El Consejo Federal Pesquero (CFP), en su Acta CFP Nro. 31/2025, tomó conocimiento del Informe de Asesoramiento y Transferencia N° 96/2025 elaborado por el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), en respuesta a la solicitud de la Dirección de Asuntos Ambientales de la Cancillería argentina.
El documento analiza la propuesta presentada por el gobierno de Brasil para incorporar al tiburón cazón (Galeorhinus galeus) y al gatuzo (Mustelus schmitti), junto con otras especies del género Mustelus, en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
La CITES (Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and Flora) es un acuerdo internacional firmado en 1973 que busca asegurar que el comercio internacional de animales y plantas silvestres no amenace su supervivencia.
La convención clasifica a las especies en tres niveles o Apéndices, según el grado de protección requerido:
- Apéndice I: especies en peligro de extinción, cuyo comercio está prácticamente prohibido.
- Apéndice II: especies que no están necesariamente en peligro, pero que podrían estarlo si su comercio no se controla.
- Apéndice III: especies protegidas por algún país que pide cooperación internacional para regular su comercio.
En este caso, la inclusión del cazón y el gatuzo en el Apéndice II implicaría que su comercio internacional estaría sujeto a permisos y certificaciones, con el fin de garantizar que las capturas sean sostenibles.
El informe del INIDEP, complementado con los aportes de la Dirección de Planificación Pesquera (DPP), incorpora las conclusiones del Grupo de Expertos de la FAO, convocado para evaluar las propuestas de enmienda de los Apéndices I y II de la CITES.
De acuerdo con ese análisis, no existen pruebas sólidas que demuestren una tendencia decreciente y continua de las poblaciones de cazón y gatuzo —las dos especies presentes en la ZEEA— que justifique su inclusión en el Apéndice II.
El INIDEP advierte que la eventual aprobación de la propuesta y la incorporación de estas especies en la CITES tendría un impacto directo sobre las pesquerías nacionales, ya que representaría el primer caso de un recurso pesquero de interés comercial argentino incluido en dicha convención. Esto podría afectar los procesos de certificación, así como la administración y manejo de los recursos pesqueros, con posibles repercusiones económicas y regulatorias para el sector.
Tras analizar el informe, el Consejo Federal Pesquero adhirió a las conclusiones del INIDEP y consideró fundamental incorporarlas en la posición técnica nacional que será presentada durante la próxima Conferencia de las Partes (CoP20) de la CITES, que se celebrará entre el 24 de noviembre y el 5 de diciembre de 2025 en Samarcanda, Uzbekistán.
