El remolcador “Querandí”, fabricado en el astillero local Servicios Portuarios Integrados (SPI), finalmente fue bautizado durante una ceremonia realizada días atrás en el Yacht Club de Puerto Madero, en Buenos Aires.
En el marco de la ceremonia, desde la empresa armadora, Antares Naviera, manifestaron la importancia de haber apostado a la construcción del buque en un astillero argentino y en un contexto complejo para la economía, allá por 2014.
“Esta embarcación es la prueba fehaciente de que es posible realizar remolcadores de altísima calidad en astilleros argentinos y que no es necesario importarlos”, evaluó Martín Braun, CEO de la firma.
El “Querandí”, vale recordarlo, tiene un capacidad de tiro de 60 toneladas y 5.200 HP de potencia. Exhibe una eslora de 28,6 metros y 10,4 de manga. Además, presenta un diseño moderno y versátil con equipamiento tecnológico de última generación.
Durante su discurso, Braun destacó el trabajo realizado por SPI y apostó a seguir alimentando la industria nacional con proyectos de este tipo, según refleja el portal de noticias Ser Industria.
“Esperemos que se den las condiciones para poder seguir construyendo en el país, generando así un circulo virtuoso y poder contribuir al desarrollo de nuestra empresa, de la industria naval, de la comunidad y del país en el que vivimos”, completó.
Por otra parte, explicó la historia que le dio origen al nombre de la embarcación: “Los Querandíes habitaban las costas del Río Paraná y del Río de La Plata, que son precisamente las aguas que el remolcador surcará. Estos indios eran robustos, fuertes y ágiles; todas estas características que hemos buscado para el remolcador Querandí”.
Se trata del “Querandí”. El evento se realizó en el Yacht Club de Puerto Madero, en Buenos Aires. Comenzará a operar en breve.