La edición número 36 de la Fiesta Nacional de los Pescadores se inició en la noche del miércoles con la apertura de la Cantina Típica instalada en forma de carpa frente a la banquina chica; aunque poco tuvo de festejo el acontecimiento.
La ceremonia estuvo marcada por el recuerdo doloroso que dejó la reciente desaparición del submarino “ARA San Juan” y, más atrás en el tiempo, el hundimiento del buque “Repunte”, con familiares de las victimas del pesquero integrados al acto.
Al tono solemne elegido para la apertura, que incluyó un minuto de silencio tras la intervención de la Banda Sinfónica Municipal, se sumó un “olvido” mayúsculo: las lanchas amarillas, cuyos actores se supone le dan sentido a la fiesta.
La problemática que afecta al eslabón menor de la industria pesquera local no apareció de forma directa en los discursos de los oradores. No estuvo en boca del presidente de la Sociedad de Patrones Pescadores, Luis Ignoto, ni del intendente, Carlos Arroyo.
Puede ser comprensible la incomodidad que genera en las autoridades referirse al tema cuando apenas quedan unas diecisiete lanchas operativas, contra las veintinueve que había el año pasado o las más de cien de antaño; pero aún así resulta llamativa la omisión.
De la misma forma, sorprende la ausencia de pescadores. Por lo observado por Pescare.com.ar, apenas unos pocos se mezclaron entre diversos concejales, autoridades locales, autoridades provinciales, directivos, gremialistas y reinas de la belleza.
“Tenemos la necesidad y obligación generacional de mantener viva esta tradición. Es también la fiesta un modo de proteger nuestro modo de vida, que es único. Y es también la posibilidad de renovar la fe y la esperanza para este nuevo año”, dijo Ignoto.
Al mismo tiempo, recordó a los trabajadores que perdieron la vida en el mar ejerciendo su trabajo: “Ese sacrificio espero que no haya sido en vano, que sirva para una mejor marina mercante, para una Armada mejor, para mejores políticas públicas”, agregó.
Luego, el dirigente se adentró en el terreno de las generalidades. Se refirió a Mar del Plata, al puerto y, principalmente, a la pesca como una fuente de ocupación laboral importante a la que hay que cuidar.
“Tenemos un país inmensamente rico, con poca población, frente a países grandes con superpoblación que nos miran y miran a nuestros recursos. Debemos preguntarnos qué debemos hacer y con qué debemos contar para que nos tengan respeto, para llevar bien en lo alto el orgullo y la dignidad nacional”, concluyó Ignoto.
A su turno, Arroyo siguió la misma línea discursiva al referir que el puerto representa el sesenta por ciento de la actividad en la ciudad. También expresó que intentó transmitirle esa idea al presidente, Mauricio Macri, durante su primer encuentro con él.
“Nosotros en nuestra gestión nos propusimos como primera medida ayudar al puerto (…) Cuando al puerto le va bien, a la ciudad le va bien. Es tan simple como eso”, sintetizó el jefe comunal.
Se puso en marcha la Fiesta de los Pescadores sin menciones a las lanchas
Por Pescare3 Minutos
La problemática específica del sector no formó parte del discurso de apertura ofrecido por el presidente de la Sociedad de Patrones, Luis Ignoto, ni del intendente Arroyo.