Atrás quedaron los seis meses en los que se calibraron equipos y se capacitó al personal, fase por momentos interrumpida por la integración del barco a la búsqueda del submarino «ARA San Juan». El buque “Víctor Angelescu” puso hoy proa hacia su primera campaña de investigación.
La embarcación del Inidep zarpó desde el puerto de Quequén hacia la Zona Común de Pesca Argentino-Uruguaya para evaluar el área de mayor captura de rayas. “Es también el estudio inicial de las especies de la familia de rayas Rajidae”, apuntaron desde el instituto.
La zona de estudio se extiende desde los 36º hasta los 39º30´de latitud, en profundidades que varían entre los 25 y 90 metros.
El crucero demandará dieciséis días de trabajo. El objetivo es colectar datos sobre la distribución y abundancia relativa de estas especies, sensibles desde el punto de vista biológico y claves para la actividad que ejercen las flotas costeras y fresqueras de altura.
En ese sentido, la reciente suspensión de la campaña para evaluar condrictios y el variado costero en general en la zona de cría “El Rincón” supuso un traspié para incorporar conocimiento científico y apuntar medidas de manejo, más allá de los límites por marea impuestos en la pesquería.
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Además, se buscará determinar la composición específica en la zona de estudio, la estructura poblacional y el estado reproductivo de los peces presentes, las áreas de concentración de rayas y analizar los motivos que producen tales agregaciones.
Participará personal científico-técnico del Inidep, así como también de la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos de Uruguay (Dinara).
Conflicto latente
Vale apuntar que la zarpada desde el puerto de Quequén obedece al conflicto latente con el Simape. Desde el gremio siguen manifestando su oposición a que el buque sea tripulado con personal de Prefectura, más allá de haber incorporado un “asesor” en pesca.
En tanto, una fuente consultada por Pescare.com.ar llegó a exponer sobre el faltante de algún elemento de seguridad a bordo del «Agelescu»: “Al ser un barco mayor a 50 metros de eslora, debe tener dos luces de tope blancas. Esto permite su mejor visualización por parte de otros barcos; sin embargo, salió con una sóla”, expuso.