Las Islas Georgias, también ocupadas ilegalmente por Gran Bretaña, son el objetivo de la campaña científica que ya estaba planificada, tal cual le había anticipado a PESCARE el director de buques del Instituto Alejandro Latte en los primeros días de enero de este año, cuando hacia una prospectiva de la performance de investigación del año pasado.
La embarcación que tiene la capacidad de trasladar a 17 científicos había comenzado su largo y ambicioso derrotero, pero algún inconveniente que aún no pudo ser confirmado de manera oficial ha hecho que tenga que poner proa nuevamente a Mar del Plata.
Las frías aguas del sur deberán esperar al menos algo más de una semana para que el emblemático buque del INIDEP llegue y comience con sus tareas de investigación en uno de sus más ambiciosos planes de viaje, para un buque que no está diseñado para este tipo de mares, no por su concepción sino porque aún no tiene los estándares de confiabilidad que tenían otros buques como el BIP Dr. Eduardo L. Holmberg y el Capitán Oca Balda ya que su característica híbrida (Diésel – eléctrico) genera ciertas dudas para mares de las características del paralelo 55, mas la lejanía y la imposibilidad de remolque cercano.
Ya entrada la noche, se podía ver a través de las imágenes satelitales que el “Angelescu” estaba navegando nuevamente hacia Mar del Plata a una velocidad de 9,5 nudos.
¿Qué sucedió? Fuentes muy cercanas del INIDEP le comentaron a PESCARE que no se trataría de una rotura del buque en general, sino que se trataría de “un diodo de los auxiliares” (evidentemente de los rectificadores de electricidad del generador de un motor auxiliar) de acuerdo a lo que pudimos saber.
Esta campaña, que está financiada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Cancillería argentina, se lleva adelante en forma conjunta entre el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero y el Instituto Antártico Argentino.
Llamativo es que Alison Blakek quien es la Comisionada británica de las Islas Georgias y Sandwich del Sur y a su vez autoimpuesta gobernadora de las Islas Malvinas, escribió en su cuenta de la red social Twitter que ella misma emitió un permiso para que el buque Víctor Angelescu realice un estudio en aguas de Georgia del Sur entre los días 7 de febrero y 2 de marzo. Insólito pero cierto.
Insólito por la manera y por la sensibilidad del tema, dado que tanto nuestro país como el Reino Unido son miembros de la Convención para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos y por ende deben cumplir con pactos preexistentes, tal es el caso de la recopilación de datos e investigación científica, tal cual ocurrió hace una década.
Una vez arribado a puerto y tras los chequeos de rigor, seguramente el INIDEP emitirá un comunicado oficial con lo sucedido con la embarcación y como seguirá el plan de campaña, dado que se perderán algunos días en lo que ya se tenía planificado debido a la reparación, pruebas e inspecciones de Prefectura Naval Argentina.
Lo concreto por estas horas, es que el derrotero del BIP Victor Angelescu cuyo destino final eran las remotas Islas Georgias del Sur quedó abortado hasta nuevo aviso.