Crecen las inquietudes ante la merma de anchoíta

La anchoíta está esquiva en el arranque de temporada. La estadística de la Subsecretaría de Pesca de la Nación señala que hasta el pasado 25 de agosto apenas se habían descargado 221 toneladas.
“A diferencia de lo que fue el año pasado, cuesta mucho encontrarla. La mayoría de los barcos volvió incompleto cuando fue tras el recurso, en algunos casos a 30 horas de Mar del Plata”, definió una fuente del medio consultada por Pescare.com.ar.
Durante 2013, las descargas alcanzaron las 18.077 toneladas. La zafra se desarrolló principalmente sobre el efectivo ubicado al norte de 41º S, hacia finales del invierno y durante la primavera. Prácticamente la totalidad de los individuos examinados fueron maduros, prevaleciendo los de talla entre 140 y 175 mm y los grupos de edad 2 y 3.
Corridos por el almanaque, en los últimos días la inquietud de los armadores se trasladó al Consejo Federal Pesquero. La Cámara Argentina de Armadores de Buques Pesqueros de Altura pidió una autorización especial para explorar la Zona de Veda Permanente de Merluza.
El sector requirió que se autorice a la flota fresquera de altura con permisos habilitantes para operar de manera irrestricta sobre anchoíta a ingresar dentro del área diseñada para la reproducción y cría de la hubbsi.
Lo propio hizo la Unión de Intereses Pesqueros Argentinos (Udipa) ante el posible desplazamiento del recurso. En ese sentido, las condiciones climáticas tampoco ayudaron para acercar a la engraulis.
Por su parte, la Cámara Argentina de Industriales del Pescado remitió una nota al Consejo, donde solicitó que se instrumenten los medios necesarios para que el Inidep realice la campaña anual de anchoíta bonaerense.
El instituto realizó la última evaluación directa de anchoíta sobre el cierre del año pasado y sin detectar anomalías; aunque el trabajo se concretó parcialmente debido a la rotura del guinche del “Capitán Oca Balda”, buque que sirvió de plataforma investigativa. Sobre un total de 43 transecciones planificadas, se pudieron completar 18.
En cualquier caso, conviene tener presente que estamos frente a una especie de ciclo vital relativamente corto, de crecimiento individual rápido y cuya abundancia depende en forma marcada del éxito de los reclutamientos.