Este hallazgo se produjo cuando la draga Afonso de Albuquerque descargaba arena extraída del río en un área previamente establecida. Durante esta operación, los trabajadores descubrieron lo que parecía ser la cabeza de un proyectil de mortero, lo que generó una inmediata alerta entre las autoridades locales.
El dragado en el Río de la Plata es una tarea esencial para garantizar la seguridad en los canales de navegación y las zonas portuarias, abarcando desde el canal de pasaje hasta áreas de maniobras y dársenas. En este contexto, el descubrimiento del artefacto explosivo resulta particularmente relevante, ya que se estima que data de hace unos 70 años, lo que lo convierte en un testigo silencioso de la historia.
De acuerdo a lo que supo PESCARE, el proyectil fue rápidamente asegurado en una tolva dentro de un predio de la Prefectura Naval Argentina. En las próximas horas, expertos de la Dirección de Arsenales del Ejército Argentino se encargarán de examinar el artefacto para determinar su estado y su posible origen.
Hipótesis Históricas: Un Vestigio de la «Revolución Libertadora»
Las primeras conjeturas sugieren que el mortero podría haberse originado en 1955, durante el bombardeo perpetrado por la autodenominada Revolución Libertadora en el Barrio Campamento de Ensenada. En ese trágico episodio, más de 50 aviones lanzaron explosivos sobre la zona, lo que plantea la posibilidad de que el proyectil descubierto esté relacionado con estos hechos.
Consultadas las autoridades de la Escuela Naval Militar, la Armada Argentina y el Ejército Argentino, ninguna ha reportado pérdidas, robos o extravíos de proyectiles similares, lo que refuerza la teoría de que este artefacto forma parte del poco venturoso capítulo de la vida de contemporánea de nuestro país.
Investigación en Curso
El Juzgado Federal N° 1 de La Plata, bajo la dirección del juez Dr. Alejo Ramos Padilla, ha ordenado la recopilación de información para avanzar en la investigación de este enigmático hallazgo. Mientras tanto, el buque “Afonso de Albuquerque” permanece atracado en el sitio 4 del Puerto La Plata, a la espera de una resolución oficial sobre su situación.
Este episodio remite a otro caso ocurrido en noviembre del año pasado, cuando se descubrió un arsenal en un hecho fortuito en Puerto Madero, destacando la naturaleza impredecible y sorprendente de este tipo de descubrimientos. En esa ocasión, una simple pelea vecinal desembocó en el hallazgo de un considerable número de armas de fuego en posesión de un hombre de 78 años, un incidente que, al igual que el reciente descubrimiento en el Río de la Plata, subraya la importancia de la vigilancia y el control en la detección de objetos peligrosos en contextos inesperados.
Este fascinante hallazgo no solo revive un capítulo histórico del país, sino que también pone de relieve la continua relevancia de las operaciones de dragado y la necesidad de mantener altos estándares de seguridad en todas las áreas relacionadas con la navegación y el manejo de materiales potencialmente peligrosos.
