La intervención directa de la gobernadora, María Eugenia Vidal, evitó en diciembre pasado que los armadores costeros pusieran en escena la crisis económica que atraviesa el sector, regalando pescado en la banquina chica.
El diálogo derivó entonces en la firma de un Acuerdo Programático que suscribieron autoridades de los gobiernos provincial y nacional, diversas cámaras empresarias y gremios. La idea era generar las condiciones para dinamizar la actividad.
Sin embargo, transcurrieron más de seis meses desde aquel acto sin que se hayan registrado avances, sólo se pudieron generar diagnósticos respecto a política pesquera, situación impositiva, infraestructura portuaria y esquema laboral.
“Lamentablemente llegamos a mayo de 2017 sin resultados concretos que motoricen la actividad y generen un esquema de certidumbre respecto al futuro”, sintetizó el gerente de la Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera, Sebastián Agliano, ante Pescare.com.ar.
Al sector también le preocupa que se descontinuara el esquema de reuniones periódicas planteado por el propio Gobierno; sobre todo frente a una coyuntura que demanda el replanteo de las consignas ya tratadas.
Reunión con autoridades
Como aspecto positivo, en cambio, destacan que persiste la voluntad de diálogo en la administración bonaerense.
La postura de la cámara fue expuesta en la reunión que sus representantes tuvieron semanas atrás en Mar del Plata con el subsecretario de Agricultura, Ganadería y Pesca provincial, Miguel Tezanos Pinto, y el director de Pesca, Miguel Dobarro.
Uno de los puntos tratados tuvo que ver con el prometido fideicomiso de 200 millones de pesos para asistir financieramente a las empresas. Si bien los funcionarios comentaron que la estructura administrativa está armada, resta la llegada de los fondos.
“Quedaron en definir la aplicación de los fondos de acuerdo al análisis que hará una comisión integrada por Nación y Provincia de Buenos Aires. Por ahora, no hay fechas concretas”, detalló Agliano.
En tanto, la implementación de la tarjeta Pactar Pesca, se hizo con montos insuficientes para la dimensión de esta industria y con un nulo esquema de promoción; es decir, pocos negocios se adhirieron y sólo cuatro firmas la suscribieron.
Traba económica
De cualquier manera, el principal problema que enfrenta hoy la industria es más económico que financiero, debido a una pérdida de rentabilidad anclada en los costos.
“Hoy lo estamos viendo en la gran migración de barcos de la provincia al sur para pescar langostino. A eso se suma el cierre o reducción de actividad en las plantas de tierra”, graficó Agliano con preocupación.
Desde la Asociación entienden que se necesitan medidas inmediatas que ayuden a recuperar el trabajo de todo el sector fresquero, una política que involucre el trabajo conjunto del Ministerio de Agroindustria, Trabajo y Producción, Senasa, AFIP, Consorcio Portuario y Prefectura. Hasta aquí, no las han obtenido.
Armadores costeros ven diluirse acuerdo firmado con Provincia y Nación
Por Pescare3 Minutos
Pasaron seis meses desde la firma del documento en el puerto local, pero no asoman medidas que motoricen la actividad.