La Cámara de Frigoríficos Exportadores de la Pesca (Cafrexport) emitió un documento que describe como crítica la situación del sector. A partir de un sondeo entre sus asociados, la entidad concluye que no hay señales de recuperación.
“Algunos de los resultados que arrojaron las preguntas realizadas demuestran que la actividad se encuentra en una meseta, con falta de incentivos o herramientas de promoción y apoyo que cambien la percepción negativa”, señalaron.
De acuerdo a la opinión relevada durante los meses de marzo y abril entre distintas empresas de este sector, compuesto por pequeñas y medianas, casi el 77 por ciento consideró que la actual situación de negocios oscila entre regular y mala.
Como reflejo de esa opinión, Cafrexport destaca que falta innovación, desarrollo de nuevos productos o procesos. Por caso, el 46,2 por ciento de los encuestados expuso que no realizó inversiones durante los últimos doce meses.
Esta coyuntura impacta en el nivel de empleo y la posibilidad de generar nuevos puestos de trabajo. El 61,5 por ciento de las empresas consultadas señaló que mantuvo su planta de personal; mientras que el 15,4 por ciento la disminuyó.
Paritarias bajo la lupa
“Los datos de empleo generan preocupación de cara al futuro, destacándose en los últimos días la incidencia negativa que tiene el acuerdo al que se arribó con el Soip y que para muchas empresas representa aumentos de salarios difíciles de enfrentar y que no se ajusta a la realidad del sector”, analizó la cámara.
La referencia apunta al aumento a cuenta de la futura paritaria rubricado recientemente entre la Cámara de la Industria Pesquera Argentina (Caipa) y el gremio: 9 mil pesos desdoblados entre marzo, abril y mayo.
“Existe una coincidencia en que esto perjudica de sobremanera a la situación de las pequeñas y medianas empresas que se verán obligadas a analizar propuestas alternativas en orden a mejorar el ingreso del personal sin comprometer la continuidad de trabajo”, expresa otro párrafo del comunicado.
En relación al empleo, también hay inquietud por los altos índices de ausentismo (ronda el 30 por ciento) y de conflictividad laboral. La llamada “industria del juicio” sigue siendo una variable de peso en la ecuación.
Marco económico
Según la mirada de Cafrexport, los datos que miden actividad muestran baja o nula rentabilidad asociada a un tipo de cambio bajo, precios que no mejoran, altos costos de producción, excesiva carga impositiva y los mencionados conflictos laborales.
Altos costos de producción, carga impositiva, conflictividad laboral, atraso cambiario e inseguridad jurídica son algunos de los puntos detectados como influyentes en el estancamiento, por lo que esperan la implementación de medidas que mejoren la competitividad.
Desde la cámara que reúne a las pymes aseguran que faltan incentivos o herramientas de promoción para la actividad.
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