Dragado, operatividad y recomposición del directorio bajo la óptica de Merlini

Hace apenas cuatro meses que Martín Merlini está al frente del Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata; pero la complejidad de esta terminal poco entiende de almanaques y demanda respuestas inmediatas.
Se impone la necesidad de dragar los canales de acceso para asegurarle continuidad al servicio de portacontenedores, optimizar la operativa de los pesqueros, rearmar el directorio y comenzar a diseñar el futuro con una mirada menos cortoplacista.
Merlini es consciente de esta agenda: “Todos los días estamos trabajando para tener un puerto mejor y esto lo hablo continuamente con Lobbosco (subsecretario de Actividades Portuarias de la Provincia)”, expresó en el comienzo de la charla que mantuvo con Pescare.com.ar para después ir profundizando algunos conceptos.
– ¿Qué datos tienen de la situación en la que está hoy el canal de acceso?
– La última batimetría la hicimos en mayo. Estamos trabajando en el límite para los buques portacontenedores que tenemos contemplados. Además, hemos hecho un estudio, hemos contratado un profesional de dragado, que nos hizo un par de recomendaciones acerca del tipo de dragado que tenemos que hacer, las zonas donde tenemos que realizarlo y la maquinaria que tenemos que utilizar. Para este año estamos evaluando un dragado de mínima para mantener la operatividad del canal. Hoy estamos con el canal operativo 100 por ciento, sin restricciones en ninguna zona; pero el mantenimiento se hace necesario.
– ¿No será necesario actualizar esa información?
– En treinta días vamos a hacer otro cálculo batimétrico para saber qué deriva tuvimos en estos últimos dos meses.

– ¿Se sabe aproximadamente cuántos metros cúbicos se tienen que extraer para cumplir ese dragado de mínima al que hacés referencia?
– De mínima serían unos 300 mil metros cúbicos. Esta es una estimación porque en realidad la contratación se hace por ajuste alzado. Vamos a andar en ese valor para el dragado de este año. En octubre pensamos hacer el llamado a licitación para trabajar tranquilos con los portacontenedores en la zona de giro, en el canal interior y en el inicio del canal exterior, que es donde mayores problemas podemos tener. Después, también vamos a darle una repasadita a la sección octava, donde amarran los portacontenedores.
– Teniendo en cuenta que será una obra chica, ¿no era conveniente emplear a la draga “Victory” que todavía está en la ciudad?
– No pudimos cerrar un acuerdo porque lamentablemente es una draga que no puede almacenar en cántara y remediar afuera, digamos. La cuestión ambiental es absolutamente necesario respetarla. Yo no puedo por el beneficio de dragar hacer una remediación inadecuada de sedimentos. Como administrador tengo que ir por la ley. Ni llegamos a hablar de dinero con Diosfer (la empresa responsable del artefacto). Ahora, estoy buscando una draga de cántara pequeña que permita remediar a 5 o 10 millas afuera como marca el plan medioambiental.
– ¿Cuánto insumirá realizar el trabajo?
– La idea es que en enero la draga termine de trabajar. Es una tarea de 60 a 90 días como máximo.

– Por otra parte, desde el sector pesquero vienen haciendo fuertes reclamos por la falta de espacios para el amarre…
– Tengo una idea particular sobre esto. Están los proyectos para la construcción de los espigones 8 y 9, que se construirán entre el dique flotante y el Muelle 10. Los hemos presentado tanto a Provincia como a Nación y lo han viso con muy buenos ojos. Estamos hablando de una inversión que supera los 600 millones de pesos. La verdad es que lo están estudiando. Quizá la sinergia público-privada genere algún tipo de expectativa. Estamos escuchando oferentes y empresas que tendrían algún interés en participar de la construcción vía un crédito internacional o una concesión público-privada. Creo que con esos dos espigones, que constituirían unos 900 metros de muelle, el puerto se vuelve autosustentable desde lo económico por cómo aumentaría la recaudación.
– ¿Qué pasa en el mientras tanto? Imagino que uno de los focos está puesto sobre los buques inactivos. ¿Es muy difícil desde lo administrativo gestionar el retiro de esos barcos?
– Es difícil con los barcos que están en una situación judicial. Hay algunos en los que hay que hacer levantamientos de interdicciones, embargos y demás. Yo soy testigo de lo que pasó en los últimos veinticinco años en el puerto y cómo se retiraron los treinta y siete barcos hundidos y el trabajo legal que costó hacer eso. El trámite puede demorar uno o dos años.
– ¿Cuántos barcos inactivos tiene hoy Mar del Plata? Desde las cámaras empresarias dicen que soy treinta o cuarenta…
– No. Embarcaciones en condiciones de ser eliminadas del registro y desguazadas serán unas dieciocho. Puede haber alguno más; pero todavía se puede encontrar a los armadores, notificarlos y exigirles el abandono del puerto o la remediación de esos bienes en desuso. Uno de los objetivos de mi gestión es sacar la mayor cantidad de barcos posibles que no registren actividad. Eso lo tengo claro. Y a partir de ahora se acabó eso de meter el barco y después vemos. Vamos a empezar a exigir el cumplimiento de todas las normas.

– ¿Y la Escollera Norte? ¿Qué destino tendrá?
– Ya le he transmitido a la administración provincial mi opinión técnica sobre esto: yo creo que tener una terminal de cruceros en ese lugar es un despropósito, no sólo administrativo, sino técnico y operativo. Estoy a favor del tráfico de cruceros; pero Mar del Plata no es ni fue un destino de cruceros. En los últimos treinta años tuvimos quince cruceros. En el futuro podrá serlo; ojalá, pero hoy no lo es.
– ¿Se repetirá el próximo año la experiencia de descargar calamar en esa zona?
– Sí, yo quiero hacerlo porque para los poteros la operativa fue fantástica en ese lugar. Hubo algún pequeño problema con la entrada y salida de camiones, pero se solucionó cambiando la reja; es decir, cosas menores para un muelle que está impecable. Me parece que hay que recuperarlo porque son 270 metros de muelle, donde se pueden poner a 12 o 14 embarcaciones a descargar sin congestionar la operativa portuaria.
– Por último, te llevo al terreno institucional; pero que también hace al funcionamiento de la estación marítima. ¿Cuándo va a estar funcionando el nuevo directorio?
– Ya salieron todas las invitaciones entre el lunes y hoy (jueves). El reglamento marca que ahora tienen veinte días más para postularse como candidatos. Y una vez que pasa esa plazo, la Subsecretaría de Actividades Portuarias recibe todos los expedientes y allí elige los candidatos. O sea que en los próximos cuarenta y cinco días estaríamos teniendo ya un directorio armado.