La arritmia operativa del año, en buen parte sustentada por los problemas económicos que atraviesa el sector, encontró su legitimación en el Consejo Federal Pesquero; más precisamente en la Resolución 13/2013.
El cuerpo habilitó mediante esa norma que los armadores puedan restituir al fondo de reserva el volumen de Cuota Individual Transferible de Captura (CITC) de merluza hubbsi que consideren no podrán pescar de acá a diciembre.
“Disposición transitoria (vence el 31 de diciembre). El titular de CITC de la especie podrá poner a disposición del Consejo Federal Pesquero el volumen anual correspondiente al año 2013 que estime que no capturará, para integrarlo a la Reserva de Administración”, plantea el texto.
Las presentaciones, que podrán hacerse hasta el 11 de noviembre, eximirán a los interesados de la extinción por falta de explotación en un porcentaje proporcional sobre el volumen total de la especie registrado para el buque.
“El mecanismo excepcional apunta a procurar el máximo desarrollo compatible con el aprovechamiento racional del recurso, plasmado en el artículo 1º de la Ley Federal de Pesca 24.922”, argumentaron las autoridades.
Merluza de cola
En el mismo sentido, el Consejo modificó a través de la Resolución 12/2013 el porcentaje límite de extinción por falta de captura para merluza de cola; en este caso considerando las temporadas 2011 y 2012.
“Establécese de manera transitoria y excepcional el porcentaje del inciso b) del artículo 9º en el 60 por ciento para los períodos anuales 2011 y 2012”, expresa la flamante normativa. Las condiciones serán las siguientes:
- La aplicación del porcentaje estará sujeta a la solicitud expresa del titular de la CITC.
- La solicitud debe ser presentada dentro de los diez días de publicada la presente resolución.
- La solicitud deberá contener la aceptación expresa de la presente resolución.
- La porción de CITC que se extinga por aplicación del inciso b) del artículo 9º del presente régimen será recalculada en el promedio del porcentaje faltante en los períodos involucrados.
En un año irregular, lo que se busca es atenuar eventuales sanciones por incumplimientos en los compromisos de trabajo asumidos y, al mismo tiempo, equilibrar la explotación en un escenario donde evidentemente persisten las asimetrías.