En el marco del Programa Puertos Seguros, impulsado por el Ministerio de la Producción, Comercio e Industria de Santa Cruz, y con el fuerte respaldo del gobernador Claudio Vidal, el Puerto de Puerto Deseado renovó exitosamente su Plan de Contingencia (PLANACON), relacionado con la emergencia por contaminación por hidrocarburos y otras sustancias peligrosas. La ceremonia se llevó a cabo el jueves 28 de noviembre y forma parte de los esfuerzos provinciales para mejorar la seguridad y protección ambiental en los puertos.
El ejercicio de simulacro, realizado en las aguas del puerto, fue supervisado por la directora de la Unidad Ejecutora Portuaria de Santa Cruz (UNEPOSC), Selsa Hernández, y contó con la colaboración de diversas entidades, como la Prefectura Naval Argentina, Coserena, YPF y un total de aproximadamente treinta empresas que participaron activamente. Este operativo, parte del programa provincial, tiene como objetivo evaluar la capacidad de respuesta ante posibles derrames de hidrocarburos y garantizar la protección ambiental.
El simulacro consistió en un ejercicio de convalidación, en el cual se simuló un derrame de hidrocarburos en el mar, activando inmediatamente el plan de contingencia para contener la mancha oleosa. Durante el procedimiento, se desplegaron barreras de contención, se utilizaron bombas absorbentes y se colocó un tanque Fast Tank para almacenar los líquidos recogidos. El simulacro comenzó a las 11:50 y concluyó a las 12:16 con la embarcación Yamana.
La técnica Silvana Martínez, responsable de la auditoría por parte de Prefectura Naval Argentina, fue la encargada de certificar la operación, otorgando la aprobación final al puerto, lo que le permitió recibir la certificación PLANACON por un período de un año. Esta certificación garantiza que Puerto Deseado está preparado para enfrentar cualquier contingencia relacionada con la contaminación por hidrocarburos y otras sustancias nocivas por el termino de un año.
En diálogo con la prensa, Selsa Hernández explicó que, para realizar estos simulacros, primero se debe coordinar una fecha con la Prefectura Naval Argentina, el organismo encargado de la supervisión. Durante el simulacro, se activa un cronómetro para medir el tiempo de respuesta de los equipos de trabajo y su eficiencia al contener el derrame. Lancha de monitoreo y mangas absorbentes son algunos de los recursos utilizados para “encapsular” y retirar el hidrocarburo del agua, transportándolo a un tanque de almacenamiento.
Hernández destacó la relevancia de este tipo de entrenamientos, mencionando que el esfuerzo de más de 30 personas en menos de 20 minutos es una muestra del compromiso y la eficacia del equipo. «Es un trabajo impresionante. La tensión y la precisión en cada paso hacen que cada simulacro sea una valiosa experiencia de aprendizaje«, comentó.
La directora de UNEPOSC también subrayó que el objetivo del programa Puertos Seguros es mejorar la infraestructura de los puertos y optimizar su gestión para asegurar que estén preparados ante cualquier eventualidad. “Esta certificación es un respaldo internacional que demuestra que Puerto Deseado cumple con los más altos estándares de seguridad y protección ambiental«, concluyó.
El programa continuará con simulacros similares en otros puertos de la provincia, como San Julián, Caleta Paula y Puerto de Punta Quilla, como parte del compromiso continuo de la provincia de Santa Cruz con la seguridad y el cuidado del medio ambiente en sus instalaciones portuarias en gran contraposición con la persistencia de dar apoyo logístico en esos mismos puertos, a la flota extranjera que opera por fuera de la milla 200, sabiendo que la misma es la que reviste mayor cantidad de infracciones ambientales y vulneraciones respeto al cuidado del medio ambiente y océanos, -con prácticas de achique de bodega a diario entre los menos dañinos al medio-, en una flota que en plena zafra de illex argentinus alcanza los 400 buques poteros. Y todo por dinero. …incongruencias y hechos que opacan esta gestión provincial más la omisión de un Estado nacional que, por fundar prácticas exageradas de libertades, no cuantifica el verdadero impacto geopolítico, de proyección y ocupación de los espacios soberanos argentinos y linderos, que esta flota tiene y persigue con renovados intentos y chances, que esta vez, podrían lograr sus objetivos. Lamentable.