China sigue privilegiando precio antes que la calidad. Es en definitiva el analisis rapido de lo que surge de los numeros de sus importaciones. El Vannamei inunda el mercado chino, presiona a la baja al langostino salvaje y austral y genera distorsion en los mercados mundiales. Europa, ante la misma situación no va en rezago. Ante bolsillos crocantes, la variable de ajuste es el precio y sobre todo, la calidad. El paladar, puede esperar.