Las lanchas encontraron por estos días algo de protagonismo en la temporada de caballa. El recurso se acercó a la costa y asoma disponible para las veinticinco unidades que sobreviven; sin embargo, los problemas se manifiestan en tierra.
Desde la Sociedad de Patrones Pescadores de Mar del Plata comunicaron que sufren “presiones” por parte de las conserveras para bajar el precio pagado en muelle.
“Las fábricas pretenden que el pescador le venda a nueve pesos en vez de diez, y para colmo quieren pagar a treinta y sesenta días, que con la inflación que hay es algo impensado (…) Pedimos un poco de consideración para el sector”, manifestó Luis Ignoto ante Pescare.com.ar.
El dirigente sin bien reconoció que existe un juego de demanda y oferta, recordó que el año pasado, cuando al resto de las embarcaciones mayores les costó encontrar el recurso, los empresarios apelaron al rendimiento obtenido por la flota de rada/ría.
Opciones acotadas
“En el año 72 había treinta y cinco conserveras, hoy sólo quedan cinco (Natusur, Copeca, Marbella, La Campagnola y Centauro). Tienen un mercado cautivo, tenemos que venderles a ellos; pero queremos condiciones que nos permitan subsistir”, continuó Ignoto.
Sobre la problemática también cargó responsabilidades sobre el Gobierno provincial y nacional: “Hay falta de compromiso”, esgrimió.
Una opción que barajan los titulares de las lanchas es congelar la producción y esperar hasta enero. Por entonces, los stocks comienzan a bajar. En ese marco, podrían encontrar un mejor valor; aunque los costos del frío, según exponen, no justifican la estrategia.
A partir del último fin de semana, el ritmo de trabajo fue intenso: “Hubo días que entre las 25 lanchas juntaron 4 mil cajones, otros de 1.600. El pescado es de buena calidad; pero ya para mañana no tenemos pedidos”, alertó Ignoto.
Posición de los industriales
Consultado, el titular de la Cámara de Industriales del Pescado, Alejandro Pennisi, explicó que existe voluntad en el sector para seguir comprando; pero que no tienen capacidad financiera.
“No podemos asumir un compromiso que después no sabemos si vamos a poder cumplir, queremos ser responsables (…) La mercadería va a los stocks. Ya hemos hecho una buena temporada e igual queríamos seguir comprando; el problema es que no tenemos créditos disponibles”, marcó.
En ese sentido, vale recordar, que los desembarques de caballa bordean las 15.500 toneladas, de acuerdo a cifras preliminares de la Subsecretaría de Pesca de la Nación. Casi todo el volumen fue aportado por la flota fresquera de altura y los barcos costeros.
Por su parte, el directivo de Natusur, Roberto Pennisi, pretendió bajarle el tono a la disputa: “No se trata de enfrentar a pescadores con industriales. Los volúmenes son grandes y los plazos, cortos. Ellos no aceptan la financiación; pero nosotros vendemos de ese modo también. Les propusimos que Coomarpes se haga cargo de la financiación, no que el pescador cargue con el peso, y tampoco conseguimos un acuerdo”, contrapuso.
Las diferencias bien podrían ser resueltas si el Estado interviniera mediante la instrumentación de una línea de crédito para atender las condciones particulares que presentan las zafras. Es un viejo pedido de la industria que como tantos otros no ha sido atendido.
Titulares de lanchas enfrentados con las conserveras por la caballa
Por Pescare3 Minutos
Tras algunos días de buena producción, desde la Sociedad de Patrones Pescadores evidenciaron malestar por la baja de valores y el pago financiado. La posición de los industriales.