En principio las acciones están apuntadas a la Terminal 4 del puerto de Buenos Aires, las que por el momento serían por tiempo ilimitado como consecuencia del problema enunciado.
Luego de la salida del área aduanera de Guillermo Michel, el gobierno de Javier Milei designó en el mismo cargo a Rosana Ángela Lodovico, quien continúa con la metodología de trabajo de su antecesor, ya que ante la sospecha de grandes irregularidades intimó a distintas empresas de logística para que regularicen su situación.
Lodovico es una funcionaria que se desempeña desde hace unas tres décadas en la Aduana argentina, teniendo como última función antes de ser designada en su nuevo cargo, como responsable de realizar el contralor de las mercaderías a través del “sistema de semáforo”.
Tal como lo indican nuestros colegas de “IProfesional”, el ya famoso semáforo no es otra cosa que un sistema que indica la detención, el avance o el retroceso de los contenedores que ingresan a puerto desde el exterior del país, con destino al nuestro.
“El canal verde significa que no ha habido ningún problema, el canal naranja significa que están revisando la documentación y podrían requerir más formularios y el canal rojo significa que la mercancía ha sido detenida para una inspección”, señalan.
A pesar de que se inmiscuyen cuestiones políticas, el reordenamiento de los controles de Aduana es otro de los puntos en los que el Gobierno Nacional quiere hacer presión, dado que consideran que en ocasiones los controles se “relajan” y se cometen maniobras de contrabando, a través de lo que se denominó oportunamente “mafia de los contenedores” en el puerto de Buenos Aires.
Se recordara una de las inspecciones sorpresas realizadas en la gestión de Michel durante el último mes de abril, donde tras varias intervenciones sorpresivas en el citado puerto, se pudieron constatar varias irregularidades en las cámaras de dos depósitos, donde las imágenes eran difusas en ese lugar, tal como ocurría en las balanzas, lo que hizo que interviniera la Justicia para determinar lo ocurrido.
La idea de la Justicia es que el sistema de monitoreo lo realice un tercero que cumpla nos las normativas que tiene el organismo de contralor y no los propios empleados de Aduana.
La medida podría extenderse a otros puertos del país donde existe el control aduanero, es decir, que la visualización de cámaras e inspecciones podría pasar a manos de terceros, más precisamente a manos privadas.
Como contrapartida a estos controles exhaustivos, el propio gobierno lanzó una medida que puede beneficiar al sector importador para que liquiden sus deudas comerciales, algo que podría beneficiar de modo directo a quienes exportan desde Uruguay hacia la Argentina.
Se trata de una iniciativa que puede beneficiar directamente a los exportadores uruguayos que tienen deudas de al menos unos 100 millones de dólares.
De esta manera se permite desde este miércoles, el acceso a unas 10 mil empresas (entre medianas, micro y pequeñas) al Mercado Único y Libre de Cambios, de modo tal que podrán acceder al dólar oficial para obtener divisas por hasta 50 mil dólares, afectando a esas empresas con deudas comerciales declaradas por hasta 500 mil dólares, dejándose abierta la posibilidad de que importadores que posean saldos pendientes de pago de cancelación de su deuda registrada en el Padrón de Deudas Comerciales por Importaciones con Proveedores del Exterior, tal como lo señaló el Banco Central de la República Argentina.
La casa matriz señaló que desde el 10 de marzo “las empresas van a poder acceder por un adicional de 100 mil dólares y a partir del 10 de abril, por el monto restante de su deuda registrada”.
No obstante, cabe mencionar, que si bien hubo cambios en la cúpula de la administración central, todas las segundas líneas, y de allí hacia abajo, continúan en actividad un total de 21.000 trabajadores en todo el país( AFIP-Aduana), cifra que incluye los 630 funcionarios que aun responden a signos políticos diferentes que la administración actual; por lo que al momento no se pueden esperar grandes cambios, pues sería en vano esperar resultados distintos con los mismos de siempre. No obstante, desde la Asociación de Funcionarios Aduaneros (AFA), advirtieron que es imposible realizar controles adecuados y fehacientes cuando debido a la escasez de personal.
La Dirección Nacional de Aduanas (DNA) apunta a una redistribución de funcionarios, no obstante se adelantó que muchas veces existe solo un funcionario por turno cuando se necesitan al menos cinco para cumplir con los controles rigurosos que el sistema impone.