El siempre espinoso trabajo de ordenar el sistema de habilitaciones y evitar la prolifereación de circuitos paralelos de procesamiento en tierra volvió a ser tratado en Mar del Plata por funcionarios de distintas áreas.
Ocurrió durante el segundo encuentro de la mesa de trabajo interinstitucional dedicada a la industria pesquera y que coordina el Senasa. La idea es ir hacia el ordenamiento y normalización de las habilitaciones de establecimientos pesqueros en sus respectivas categorías.
Esto implica establecer particularidades entre plantas municipales, provinciales, de tráfico federal y exportación. Además, se busca mejorar y compatibilizar los controles sobre la trazabilidad y la inocuidad de los productos.
“Las autoridades de cada organismo se comprometieron a compartir información sobre los datos de descargas, ingresos en plantas, capacidad operativa de los establecimientos y la situación de los mismos en cuanto a la vigencia e instancias de habilitaciones”, informó Senasa.
La reunión contó con la presencia del director del Centro Regional Buenos Aires Sur del Senasa, Emiliano Cacace; el jefe de gabinete de la Subsecretaría de Pesca de la Nación, Alejandro Latte; y el secretario de Producción de General Pueyrredón, Ricardo de Rosa.
A ellos se sumó el subdirector de la Dirección de Pesca provincial, Omar Busilanchi, y el presidente del Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata, Martín Merlini. A diferencia del primer encuentro, no hubo representantes del sector privado.
Además, particularmente desde el Municipio se planteó la posibilidad de organizar un sistema de muestreo que permita controlar la inocuidad del pescado, previamente a su ingreso al circuito de comercialización en el mercado local.
En este sentido, Cacace ofreció a los representantes municipales la capacitación necesaria y la colaboración para mejorar el sistema de fiscalización sanitaria.
El tema se trató durante el segundo encuentro de la mesa de trabajo interinstitucional que coordina el Senasa.