La misma postura ya la habían expresado en 2012; pero ante el cambio de Gobierno y versiones que circulan, las cámaras empresarias de Mar del Plata lo ratificaron en los últimos días. Tanto Cepa como Caipa se expresaron en desacuerdo con la posible incorporación de poteros chinos al caladero argentino.
La posición de las empresas locales llegó al Consejo Federal Pesquero (CFP) la semana pasada en forma de nota. El texto, al que tuvo acceso Pescare.com.ar, argumenta que el rendimiento actual del calamar y las dificultades de mercado no admiten un crecimiento de la flota.
“Manifestamos nuestro desacuerdo con la incorporación de buques pesqueros de terceros países aún locados a casco desnudo u otra forma ya que consideramos que las condiciones del recurso actual y de mercado no están en los mejores momentos como para emprender este tipo de incorporación…”, sentencian.
Puerta abierta
Fue durante la séptima reunión del Subcomité de Pesca China Argentina, realizada en noviembre del año pasado en Qingdao, donde se dejó abierta la posibilidad para que el “Gigante Asiático” anexe veinte poteros a las aguas nacionales bajo la figura de “locación a casco desnudo”.
Durante aquel encuentro, los chinos solicitaron que el CFP reabra el registro para llevar adelante la operación. El Gobierno argentino consideró entonces que la propuesta era factible.
Tiempo después llegó el cambio en la administración y el incidente, con balas incluidas, protagonizado por el “Lu Yan Yuan Yu 010”, capturado cuando pescaba ilegalmente frente a las costas de Puerto Madryn.
Más allá de estos ingredientes, la nota de Cepa y Caipa agrega: “Tal cual lo decíamos en la nota de 2012, no es que este recurso en algún momento y por su condición de anual y altamente dinámico no permita la operación de mayor cantidad de barcos, lo que hay que hacer es que se puedan tener instrumentos para poder trabajar en situaciones de alta captura, favoreciendo justamente a las empresas, en este caso, argentinas, las cuales deben soportar los momentos de buena y mala actividad”.
Competencia desleal
Una posición similar habían esbozado desde Capeca. Las pesqueras locales pretenden que no se genere una competencia estable con quienes son precisamente compradores del illex argentino. Son los mismos actores chinos que han demostrado reticencia a los pedidos barajados en las negociaciones entre ambos países.
Por caso, aún no han producido la baja de aranceles para el ingreso de calamar argentino comprometida años atrás, cuando consiguieron entrar los primeros diez poteros con permisos de entre 7 y 16 años de extensión.
¿Bajo qué argumento se da este debate? Con un estudio que data de 2006, el CFP esgrime que la pesquería de calamar se sostiene con 104 barcos; mientras que durante las últimas temporadas operaron unos 65 en promedio.
Cepa y Caipa manifestaron su desacuerdo con la posible incorporación de poteros chinos
Por Pescare3 Minutos
Mediante una nota enviada al Consejo Federal Pesquero, las cámaras aseguraron que la situación del recurso no admite nuevos actores en el caladero argentino.