El pasado viernes se reunió la Comisión de Análisis y Seguimiento de la Pesquería de Langostino que funciona en el ámbito del Consejo Federal Pesquero. El encuentro congregó a diversos actores de la industria.
Entre otros, estuvieron el subsecretario de Pesca de la Nación, Tomás Gerpe, representantes de Cepa, Caipa, Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera, Cámara de Armadores, Capeca, Capech, Cafach, Capip, Newsan y Conarpesa.
Además, se sumaron directivos del Inidep, investigadores y representantes en el Consejo de Buenos Aires, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
Uno de los ejes que atravesó la reunión fue el manejo de la especie a partir de su exponencial crecimiento de los últimos años.
Según pudo saber Pescare.com.ar, hay intenciones de rediscutir medidas que hacen a zonas y formas de operar, áreas de protección, la incorporación de buques tangoneros e incluso la posibilidad de certificar la pesquería como sustentable.
Desde Cepa avisaron en la Comisión que enviarán una propuesta de temas a tratar en los próximos días. En tanto, Chubut ya lanzó algunas opiniones; aunque sin el consenso que se había anunciado. Capeca, por caso, tomó cierta distancia del documento elaborado por la Provincia.
“Nos comprometimos a seguir debatiendo. Este fue un primer paso. Hay muchos temas complejos que piden prudencia”, definió un empresario consultado por este medio.
Números de la pesquería
Mientras tanto, circularon datos sobre capturas y exportaciones. Esta temporada 2016 ya dejó en los muelles más de 95 mil toneladas. El 74 por ciento de ese volumen se obtuvo en aguas nacionales.
Por su parte, los envíos al exterior, con dominio de los tamaños L1 y L2, sumaron hasta junio unas 58.889 toneladas a cambio de 353,6 millones de dólares.
Dentro de este esquema, las exportaciones realizadas desde Puerto Madyn y Deseado (51.573 t.) obtuvieron reembolsos por 28,6 millones de dólares, un beneficio que Mar del Plata carece. En cualquier caso, por este puerto salieron 5.384 toneladas.
En términos biológicos, es evidente que el creciente volumen parece reflejar un cambio importante en el ecosistema, aunque no se descarta que el esquema de manejo pueda haber influido en ese salto, fue una de las conclusiones extraídas.
El especialista del Inidep, Daniel Bertuche, planteó que hubo cambios en el medio que favorecieron al langostino; pero que al mismo tiempo por las características de la especie podría esperarse una modificación de la tendencia.
Pesca incidental
Desde el instituto también se hizo hincapié en la pesca incidental de merluza. En ese sentido, se analizó la información aportada por los observadores de a bordo.
Los rendimientos importantes de merluza se obtuvieron entre mediados de junio y fines de julio con valores promedio superiores a 300 k/h. Las relaciones merluza/langostino de este período estuvieron por encima de 0,1. La estimación preliminar de by-catch osciló entre 7.200 y 9.300 toneladas.