Reparaciones, abastecimiento de combustible y provisión de alimentos. Estos son algunos de los servicios que el secretario de Pesca de Chubut, Adrián Awstin, está proponiendo ofrecer a la flota extranjera que opera en la Milla 201.
El funcionario patagónico proyecta a Comodoro Rivadavia como puerto base para brindar el apoyo logístico a buques españoles, rusos, coreanos y de otras nacionalidades: “Sería una gran oportunidad”, manifestó esta semana en declaraciones a Radio Camioneros (FM 104.1).
Polémico, por momentos contradictorio, Awstin profundizó la base que sustenta su iniciativa: “No nos gusta que esos barcos estén ahí, nos molestan; pero siguen estando. Podemos seguir peleándonos sin resultados o también podemos seguir peleándonos; pero usufructuando todos los servicios que necesitan”, dijo.
Ordenamiento o servicios
A propósito, por estos días vuelve a ser intensa la presencia de la flota extranjera al borde de nuestra Zona Económica Exclusiva. Muchos llegan a esta parte del Atlántico Sur subsidiados por sus países de origen. Además, operan al margen de cualquier regulación pesquera y, en algunos casos, con tripulaciones sobrexigidas y mal pagas.
Controlar el espacio marítimo nacional conformado por 138.303 millas náuticas cuadradas no resulta una tarea sencilla para la Prefectura y la Armada. De allí que en la industria pesquera predomina la idea de fomentar un ordenamiento del área, haciendo respetar los derechos del país como Estado ribereño.
Awstin, en cambio, parece tener otro concepto: “Yo hice está propuesta: que podríamos evaluar la posibilidad de usufructuar los 300 y pico de barcos que están en la milla 201. Hacerle nosotros las reparaciones, la provisión de combustible, la provisión de alimentos”, dijo.
La comparación con Montevideo
El secretario entiende que para los armadores extranjeros Comodoro sería una opción más ventajosa que, por caso, Montevideo. Dada la cercanía con la zona de pesca, en un día de navegación estarían amarrados en Chubut.
En relación a los uruguayos precisamente señaló: “Ellos se hacen la Madre Teresa de Calculta de Sudamércia y también están usufructuando algo que no es del todo santo (…) Los derechos humanos en esos barcos es un tema re contra discutido; a partir de lo cual la Argentina podría tomar la decisión de prestar servicios quizá no a todos”.
En ese sentido, se manifestó proclive a firmar un convenio con España, Rusia o Corea: “A esos barcos que sí cumplen con ciertos requisitos internacionales generarle todo el abastecimiento que necesiten (…) Está buenísimo debatirlo”, concluyó.