Como venimos diciendo casi a modo de anticipo o bien de certezas, el tema de las offshore no empezó o apenas ha dado su “puntapié inicial”.
Es evidente que hay ciertos sectores que se oponen por la oposición misma. “No sé de qué se trata pero me opongo”, otros, mas relevantes, visibles y ruidosos, buscan subirse a la fuerte exposición mediática que lleva esta noticia, y unos pocos, son parte de la posibilidad de obtener réditos de una situación particular.
Entre las disparidades de voces lo más rescatable sin dudas es la enseñanza, la docencia, la explicación. Quien tenga dudas que se saque las mismas a través de profesionales y no por simples comentarios o por exposición mediática tendenciosa con claros objetivos solapados.
Entre los profesionales que tienen el entusiasmo de transmitir sus conocimientos el próximo jueves habrá una charla online sobre la explotación del petróleo offshore en el Mar Argentino, a cargo de Guillermo Reidy y Diego Lamacchia que días atrás dialogó con PESCARE. La misma será a las 18.30 vía zoom.
Por otro lado, siempre desde el mismo carril de los profesionales, el Colegio de Ingenieros de la provincia de Buenos Aires se han manifestado también sobre las offshore, en este caso a favor de que los proyectos de exploración y explotación gasífera y petrolera.
Han sido duros y concretos en su comunicado, donde consideran como “distorsivo” el planteo de sectores a los que han calificados como “pseudo ambientalistas”.
Para fundamentar sus dichos se expresaron diciendo que “las mismas se situarían a más de 300 km. de la costa marplatense, por lo que hablar de contaminación visual, sonora o de otro tipo en la costa es una posición sugerentemente tendenciosa”.
El Colegio de Ingenieros trajo a la memoria que desde hace más de 90 años se explora la plataforma marítima argentina y concretamente la década del 60 en la zona de la provincia de Buenos Aires, dando un detalle técnico: “se hace con técnicas similares a las que ahora se cuestionan, pero que no produjeron ningún desastre ambiental”.
Quien llevó la voz cantante en este tema, el presidente del CIPBA Norberte Beliera hizo mención que hace 10 años también se registraron algunas posiciones extremas de los mismos sectores, cuando se comenzó a hablar de la explotación no tradicional en Vaca Muerta, haciendo mención también a que el resultado de ese proceso solo trajo crecimiento económico para esa región.
Beliera sostuvo firmemente que “lo mismo queremos para los bonaerenses, y, en especial para los vecinos de Mar del Plata, tan castigados por el desempleo. La Feliz volverá a serlo, pero como una ciudad activa los 365 días del año, para todos, económicamente hablando, ya que pasará a ser la base de apoyo en tierra, de las actividades de las plataformas situadas en océano abierto, a más de 300 kilómetros, no frente a sus playas como falsamente también sostienen desde esos sectores”.
También el presidente del Colegio de Ingenieros hizo referencia a posibles accidentes y potenciales derrames donde mostrar que consideran que las estadísticas desmienten las posiciones tremendistas de esos falsos ambientalistas, ya que la empresa noruega Equinor, que lleva adelante este proyecto del cual se habla a diario no solo en el sector pesquero sino también en el sector industrial, explota miles de pozos y no ha registrado ningún tipo de siniestro.
También pusieron de relieve que la República Argentina cuenta con un sistema de monitoreo para la detección temprana de derrames de hidrocarburos a través de imágenes satelitales controlado por la CONEA.
De acuerdo a material de carácter privado al que pudimos tener acceso, indica que se podrían genera 200 mil barriles de petróleo por día, lo que daría para el país en forma directa en impuestos y regalías, ingresos por 4700 millones de dólares.
Por Gustavo Seira