Las firmas Coomarpes y Agustiner anticiparon una inversión de casi 20 millones de pesos para el desarrollo conjunto de una planta de biodigestión anaeróbica que requiere tecnología de última generación.
Desde las empresas aseguran que la obra apunta a la eliminación casi total de los desechos y, al mismo tiempo, va hacia un aprovechamiento de gases que alimentarán calderas y/o generarán electricidad.
Así fue destacado por Agustín Galli, director de Agustiner, y Rubén Burkhard, gerente de Coomarpes, durante la presentación que realizaron ante autoridades en el Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata.
“Nos comprometimos a ordenar la actividad y hemos encontrado una positiva y pronta respuesta para minimizar el impacto ambiental sobre nuestro puerto y zonas cercanas de la ciudad”, destacó Jorge Hidalgo, presidente del ente.
Del encuentro también participaron el presidente de Obras Sanitarias Sociedad de Estado (OSSE), Mario Dell Olio, y el gerente de Calidad del organismo, Marcelo Scagliola.
Además, se sumaron Darío Sócrate, en representación de la subsecretaría de Pesca de la Nación, Daniel Sosa, por la Dirección de Pesca bonaerense, y Carlos Galarza, por el Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS).
Según los números que manejan las harineras, al año procesan unas 160 mil toneladas de desechos derivados de la actividad pesquera. “Esta industria es la recicladora más importante de la ciudad”, aseguró Galli.
En tanto, Hidalgo confirmó que el Consorcio pondrá a disposición un espacio físico dentro de su jurisdicción para el desarrollo de la nueva planta.
“Buscamos entre todos la mejor solución porque reconocemos la importancia de esta industria harinera y necesitamos su mejor funcionamiento en el marco de las normas ambientales vigentes”, acotó.
Proyectan la construcción de una planta de biodigestión con el objetivo de reducir efluentes líquidos y gaseosos. El plan fue presentado ante el Consorcio Portuario.
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