El comienzo de año encuentra al sector con dos frentes que amenazan su desarrollo y, en algunos segmentos, su subsistencia: el incremento de las retenciones a las exportaciones y un mercado internacional con diversos precios en baja.
Mediante el decreto 37/2019, el Gobierno nacional elevó los derechos de exportación al 9 por ciento, dejando sin efecto los 4 pesos por dólar que hasta el pasado 14 de diciembre percibía por cada envío al exterior que realiza la industria.
La medida, que busca ampliar la recaudación y se presenta como “solidaria” para con los sectores menos favorecidos de la sociedad, podría tener contrariamente un fuerte impacto negativo sobre la generación de empleo y la producción.
Al menos así lo advierten representantes de diversas cámaras empresarias, quienes ya iniciaron gestiones antes las autoridades para rever el esquema. “Estamos exportando impuestos y eso perjudica a toda la actividad”, advierten.
El contexto internacional tampoco ayuda. La suba de los derechos de exportación coincide con un mercado complejo. Los valores promedio de las principales especies acumularon bajas hasta octubre de 2019, según los últimos datos disponibles del Indec.
. Langostino: 6.427 dólares por tonelada / -8,2 por ciento interanual
. Merluza hubbsi: 2.525 dólares por tonelada / -5,4 por ciento interanual
. Calamar: 2.490 dólares por tonelada / -3,1 por ciento interanual
. Raya: 3.200 dólares por tonelada / -4,4 por ciento interanual
. Abadejo: 5.855 dólares por toneladas / -11,1 por ciento interanual
. Centolla: 16.952 dólares por tonelada / -6,5 por ciento interanual
A la mayor presión tributaria, habría que anexar las distintas cotizaciones que tiene el dólar fronteras adentro: “Tenemos insumos con un dólar libre y exportamos con un dólar oficial”, evalúan en la industria con una inquietud creciente.