La abundancia del langostino excede a las aguas patagónicas; incluso alcanza a manifestarse en aguas cercanas al puerto local. En los últimos días, barcos costeros se toparon con el recurso a dos horas al este de Mar del Plata.
De acuerdo a lo que pudo saber Pescare.com.ar, las embarcaciones venían levantando entre 40 y 50 cajones del crustáceo como promedio, aunque con algún pico cercano a los trescientos cajones en un barco en particular.
En todos los casos, los buques accedieron al recurso mediante una red de arrastre con un tipo de malla grande; lejos del ideal utilizado en la faena específica. El detalle amplifica la novedad para la flota local.
Sin embargo, y al menos por ahora, nadie imagina que la pesquería vaya a cobrar impulso propio en esta zona. La demanda en tierra ya está bien cubierta, por lo que el precio de venta termina siendo bajo (cercano a los 15 pesos por kilo).
Como antecedente inmediato, vale mencionar que los fresqueros también llegaron a pescar langostino durante septiembre, cuando con redes pelágicas buscaban caballa un poco más al sur, entre el paralelo 41° y 42°.
En esa zona ya se había registrado en mayo actividad de tangoneros con buenos rendimientos. Desde el Inidep advirtieron sobre cambios en el ecosistema, modificaciones que por alguna razón favorece la proliferación de los invertebrados, como el langostino, en distintas áreas.
Se habla de cambio climático o alteraciones por pesca como posibles causas. ¿El resto de las especies podría sufrir una merma frente a este nuevo escenario? Los investigadores por el momento manejan esta última posibilidad como una hipótesis.
La dificultad para avanzar con el conocimiento científico habita en el propio instituto. Sin campañas de investigación es muy difícil comprobar o refutar cualquier conjetura; lo cierto es que el langostino da señales aquí cerca.
Barcos costeros se toparon con el crustáceo frente a las costas de la ciudad. Otra muestra del crecimiento que experimenta la especie.