En el último mes de julio un grupo de trabajadores tomaron parte de las instalaciones de la empresa Giorno (propiedad de la española Iberconsa). Los afiliados al SOIP reclamaban en su momento un mayor valor para reprocesar langostino.
Tras varios días medió el Ministerio de Trabajo, luego de que la empresa presentara una denuncia por usurpación de sus instalaciones y se lograra un aumento para el valor por el kilo de langostino procesado.
Ahora surge un nuevo conflicto con los trabajadores que se desempeñan en la calle Ayolas. Denuncian que están padeciendo permanentemente cambios en los trabajos que tienen que hacer y eso impacta en forma directa en sus remuneraciones.
Argumentan que esos cambios impuestos por la empresa en referencia a sus tareas los terminan perjudicando de modo tal que sus haberes llegan a reducirse hasta en un 40%.
Si bien PESCARE no pudo tomar contacto directo con representantes del SOIP (una constante), trabajadores que solicitaron la más absoluta reserva de sus nombres al dialogar con nuestro portal, argumentan que van pasando de una tarea a otra en forma constante.
“Un día trabajamos de peones, otro tenemos que pelar langostino y al otro vamos a la parte de envasado, como son tareas distintas nunca sabemos lo que podemos llegar a cobrar. Cuesta adaptarse a este sistema de trabajo, no solo por lo que tenemos que hacer sino también porque no sabemos lo que realmente tenemos que cobrar”, sostuvo uno de los pocos trabajadores que se animó a hablar ya que temen por represalias que puedan llegar al despido.
Trascendió que ya mantuvieron al menos dos reuniones con los directivos a cargo del establecimiento, pero que no han podido llegar a un acuerdo con el Sindicato que comanda Cristina Ledesma, tras lo cual, los trabajadores al no tener una respuesta afirmativa a su reclamo, comenzaron una ruidosa protesta en el frente de la empresa ubicada en Ayolas y Pescadores, sin que se produjeran incidentes.