Las variables que explican la crisis económica de la industria se sostienen. Una de las muestras está en el mercado. Los precios de exportación de diferentes especies experimentan considerables bajas interanuales.
La información está expuesta en el último Informe de Coyuntura que dio a conocer la Subsecretaría de Pesca de la Nación, sobre la base de datos que aportó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Dentro de ese conjunto de recursos aparece uno de los pilares de la actividad en Mar del Plata: merluza, con un retroceso del 7,5 por ciento en el valor promedio pagado por tonelada entre enero y junio con respecto al mismo período de 2012.
La hubbsi registró en H&G&T (150-250 gramos), interfoliado, congelado a bordo entre 1.250 y 1.550 dólares; y en filetes (60-120 gramos), interfoliado, poca espina, sin piel oscilaciones entre los 2.800 3.100 dólares.
En contraposición a las buenas capturas de la presente temporada, más acentuada fue la caída del calamar, localizada en la zona del 15,7 por ciento con la siguiente escala media: entero (300 gramos), 1.500-1.650 dólares; vaina 1.800-2.300; y tubo, 2.300-3.500.
También exhiben precios menores a los del año pasado raya (1.775 dólares / -15,1 por ciento), corvina (entera 500-1000 gramos congelada: 1.200-1.600 dólares / -3 por ciento) y vieira (7.916 dólares / -30,3 por ciento).
En tanto, el langostino muestra una leve recuperación: +1,2 por ciento, considerando los promedios de las diferentes franjas, L1: 7.200/9.300, L2: 6.600/7.800 y L3: 5.500/4.800 dólares, siempre de acuerdo a la información oficial.
Un marco similar envuelve a los envíos de merluza de cola (2.537 dólares / +1,7 por ciento). Sin embargo, en todos los casos el avance de la inflación sobre los costos operativos de barcos y plantas cubre de sombras los balances.
Las consultoras privadas estiman que el alza de precios general ronda el 25 por ciento. Sólo en julio dio un salto de 2,5 puntos. Paralelamente, se advierte una aceleración en el ritmo devaluatorio del peso frente a la moneda norteamericana; pero que por ahora no le devuelve competitividad al sector.
La progresiva retirada de capitales extranjeros que estaban asentados en la Patagonia bajo nombres como Yuken, Alpesca y Nissui, por mencionar algunos, muestra la decadencia del negocio; pero la onda expansiva amenaza con extenderse hacia el norte, si no media un brusco cambio de escenario.
Los datos que aporta el Indec señalan que los valores de merluza hubbsi, calamar y raya, entre otros recursos, acumulan bajas interanuales. Contraste con la suba de costos.