El último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) muestra que el Índice de Producción Industrial Pesquero (IPI) se septiembre creció un 55,3% interanual, marcando uno de los mejores desempeños mensuales del año.
Este repunte estuvo motorizado principalmente por el langostino en lo puntual del mes, mientras se arrastra en el año las abundantes capturas de calamar, dos especies que sostienen el mayor volumen de exportación del país, y que impulsaron los desembarques tanto en buques fresqueros como congeladores.
Sin embargo, el acumulado enero-septiembre aún refleja una caída del 13,4% respecto del mismo período de 2024, evidenciando que la recuperación todavía no compensa los meses de menor actividad observados en la primera mitad del año como consecuencia de conflictos de origen gremial en la especie langostino sobre el segmento de buques congeladores.
Dentro del sector pesquero, la pesca marítima fue el principal motor del crecimiento, con un aumento interanual de 57,7% en septiembre, mientras que la acuicultura —actividad que incluye el cultivo de especies como trucha o pejerrey— registró una suba de 39,1% respecto al mismo mes del año anterior.

Aun así, en el acumulado de 2025, la pesca marítima muestra un retroceso del 19,6%, producto de los bajos niveles de actividad registrados entre junio y julio, meses afectados por los conflictos gremiales, las condiciones climaticas y la dispersión de los cardúmenes. En contraste, la acuicultura mantiene un crecimiento sostenido del 36,5%, consolidando su aporte al conjunto de la industria.
Entre las especies relevadas, el langostino volvió a liderar la producción nacional, con un incremento del 84,1% interanual en septiembre

El repunte de la flota tangonera se tradujo en un mayor volumen de descargas en puertos del sur, especialmente Rawson y Puerto Madryn.
El calamar, que había mostrado una fuerte caída durante el invierno, también contribuyó a la mejora del índice general. En tanto, las capturas de merluza y otras especies de fondo se mantuvieron estables, con variaciones leves respecto al año anterior.
En conjunto, la producción de especies de mayor valor comercial fue la que más aportó al crecimiento del mes.
Por tipo de embarcación, el informe detalla que los buques fresqueros registraron un salto del 75,8% interanual, mientras que los buques congeladores crecieron un 54,7% respecto a septiembre de 2024.

La mayor incidencia correspondió a los congeladores, responsables de casi el 47% de la variación total del índice de pesca marítima, mientras que los fresqueros aportaron alrededor del 11%.
Este comportamiento se explica por la buena performance de las mareas langostineras en aguas nacionales y la reactivación de la flota calamarera, que logró extender sus operaciones gracias a la estabilidad del recurso en el Atlántico Sur.
Aunque el sector mostró una mejora significativa en septiembre, el INDEC advierte que el comportamiento del IPI pesquero sigue siendo irregular y sujeto a fuertes oscilaciones estacionales, asociadas a los ciclos de las principales especies y a la estacionalidad de las zafras.
De mantenerse el ritmo de capturas y el nivel de actividad de los últimos meses, los analistas estiman que la producción podría cerrar el año con una contracción menor a la proyectada a mediados de año y cercana a un dígito. El desafío, según coinciden fuentes del sector, será sostener la rentabilidad frente a los costos operativos y las variaciones del mercado internacional, -(que hoy soplan a favor respecto al año 2024)-, factores que condicionan la rentabilidad de las exportaciones pesqueras argentinas.
