El canciller argentino Felipe Solá, hizo un encendido reclamo ante la Organización Mundial del Comercio, solicitando la eliminación permanente de los subsidios a la considerada pesca ilegal.
Desde las más alta esferas del gobierno se puso “bajo la lupa” a empresas de origen taiwanés y español, sobre todo aquellas que operan en el Mar Argentino, no dejando de lado a empresas de origen chino a quien también se estaría mirando con detenimiento.
El canciller argentino fue parte de la reunión a nivel ministerial del Comité de Negociaciones Comerciales sobre la subvención a la pesca.
Solá señaló que “es imprescindible un acuerdo multilateral que pueda establecer prohibiciones específicas de subvenciones en relación con la pesca ilegal, que no esté declarada o reglamentada».
Según pudo saberse se han detectado empresas de Taiwán y de España que pescan dentro del Mar Argentino, pero que tiene permisos de las Islas Malvinas, por lo que el Poder Ejecutivo podría adoptar algún tipo de medida.
Solá manifestó que “el impacto fuertemente negativo que estos subsidios tienen en las pesquerías, torna imperante alcanzar un acuerdo para eliminarlos. Gran parte de estos subsidios sostienen flotas que pescan en altamar, en particular en aguas distantes, y principalmente en las áreas adyacentes a las zonas económicas exclusivas, con consecuencias muy negativas para la sostenibilidad de los océanos, los mares, los recursos marinos y para el desarrollo del país afectado”
Asimismo, este año se registro la mayor cantidad de pesqueros de origen Taiwanés y coreanos operando en mares adyacentes al oeste de las Islas Malvinas, con licencia de Puerto Argentino, dentro de la plataforma argentina, en una zona de exclusión que persiste desde 1982.