Mejorar la oferta de contenedores, ampliar el movimiento en el muelle, diversificar la carga y, como consecuencia, reducir los costos del flete marítimo. Estos son algunos de los objetivos que plantean desde la Terminal de Contenedores Dos.
Los operadores creen que incorporar un buque es el engranaje que les falta para dar ese salto: “Estamos buscando rentar un barco. Tenemos un par ya vistos”, confirmó el directivo Emilio Bustamante ante la consulta de Pescare.com.ar.
Luego, ofreció más detalles: “Hemos estado charlando con gente de la firma Maruba. También vamos a tener otra reunión en Panamá con la cámara que nuclea a las empresas navieras de allá. Estamos viendo posibilidades”, dijo.
Hacia Brasil
Según explicó, la idea es traer un feeder; un medio para transportar contenedores desde Mar del Plata hacia Brasil, el mismo recorrido que hoy realizan periódicamente las unidades al servicio de Maersk y MSC que tocan el puerto local.
Se trata de una ruta muy empleada por la industria pesquera y que podría ser tentadora para otros sectores.
Empresas como McCain alimentan desde esta región bocas en Porto Alegre y San Pablo. La firma de papas congeladas mueve unos 10 mil contenedores al año, todo por camión.
Asimismo, emerge la posibilidad de movilizar los oleoquímicos y derivados que fabrica Materia Hermanos en la ciudad, que implican unos 4 mil contenedores por año; también ir acercando a las harineras y a los productores del cordón frutihorticola.
Límites y posibilidades
“Por el momento estamos trabajando con los barcos de Maersk y MSC y eso nos tiene un poco pisados, un poco limitados. Ellos tienen sus condiciones. Nosotros queremos traer algo multipropósito; o sea, que pueda cargar contenedores de estas navieras y otras como GMA y Hapag-Lloyd. Agregarlos a la oferta del flete marítimo”, describió Bustamante.
La clave del proyecto es ofrecer una plataforma de transporte propia para dar respuesta a todos y no solamente a los dadores de carga refrigerada, el segmento más rentable del negocio.
“Hay empresas que están confiando en el puerto como Moscuzza, Giorno (Grupo Valastro) y en parte Solimeno. De los productos de la pesca, el sesenta o setenta por ciento sale por acá, el resto sigue yéndose en camión por ruta”, graficó Bustamante.
Uno de las razones que explica este comportamiento es el alto costo del flete que cobran aquí las navieras: “Cuando tengamos una mayor oferta creemos que esto lo vamos a poder ir cambiando (…) Me da la impresión que se está dando una onda positiva que nos anima a buscar alternativas. La carga está”, cerró el empresario.