Una pesquera cerraría sus puertas si no se le amplía el cupo para la pesca de centolla. Los trabajadores del establecimiento enviaron notas a legisladores para que intervengan en el tema y poder asegurar su fuente de trabajo.
La situación ocurre en Puerto San Julián en la provincia de Santa Cruz, donde funciona una de las pesqueras dedicada a la pesca y procesamiento de la cotizada centolla desde el año 2016.
Si bien no se oficializó la idea de cerrar sus puertas, se les comunicó de modo informal a más de un centenar de trabajadores que dada la disminución de la cuota de centolla que le es asignada año a año y ante la falta de respuestas del Consejo Federal Pesquero (en lo que va del año aún no sesionó), la idea de la compañía es cerrar sus puertas definitivamente en la Argentina.
Cuanto menos es llamativa la versión sobre la situación, ya que en la sesión del 23 de noviembre del año que finalizó, la misma empresa solicitó el reemplazo temporal del BP Pioneros (M.N. 02735) por el buque Cristo Redentor para la zafra 2023/2024, con motivo de las reparaciones que debió efectuar en el buque aprobado en el proyecto.
La Autoridad de Aplicación remitió la solicitud con la documentación adjunta a la misma; evaluada la petición, se decidió por unanimidad hacer lugar a la solicitud de reemplazo temporal de las embarcaciones, en el marco del proyecto de explotación exclusiva de la especie centolla aprobado a favor de “Food Partners Patagonia S.A.”, durante la temporada de captura de la especie 2023/2024, lo que quedó plasmado en el Acta CFP Nro. 37/2023.
El argumento de la empresa es que no son suficientes las 44 toneladas que la empresa tiene en la actualidad para capturar, dado que han hecho una inversión muy alta, por lo que pretenden una mayor cuota del recurso.
No menos llamativo es que se encuentran reglamentados los mecanismos de control y fiscalización de la especie, la que a través de la Disposición 308/2023 y la Resolución 11/2023, se establecieron nuevos requisitos para que las empresas armadoras puedan solicitar la renovación de permisos de pesca para la especie Lithodes santolla (Centolla).
De esta manera se implementaron políticas de incentivo y promoción para fomentar la contratación de tripulación argentina por encima del 75% que está establecido por ley y así alentar la reducción de años de antigüedad de los buques, incentivar el compromiso de elaboración en planta en tierra, promover la innovación tecnológica en la operatoria que optimice la elaboración en tierra en fresco o permita el desembarco de ejemplares vivos, como así también el compromiso de operar en el área adyacente a la zona Económica Exclusiva de nuestro país durante al menos siete días por año.
La nota que le fue enviada al diputado Piero Boffi, para que se involucre en el tema y firmada por algunos de los trabajadores de la empresa, expresa que “es insostenible una inversión como la de la empresa Food Partners con 44 toneladas anuales de centolla.”
“En contramano de las 940 toneladas que se determinan y reparten en el área Zona Sur I y II para las empresas que no tienen plantas activas en Santa Cruz, ni en otras provincias, ya que su actividad es por barcos congeladores que no generan ningún tipo de trabajo en tierra, ni desarrollo pesquero a largo plazo. Es decir, que es una actividad netamente extractiva. Queremos que San Julián no pierda fuentes de empleo y de inversión privada, por el mal manejo de los recursos pesqueros, los cuales se distribuyen inequitativamente entre las empresas sin contemplar las inversiones, generación de mano de obra y compromiso social. Nuestra situación es crítica y grave, por lo cual estamos dispuestos a iniciar medidas de acción directa para garantizar nuestros empleos”.