Desde julio a esta parte se advierte la tendencia en los números que registra el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). China se convirtió en el principal destino para las exportaciones pesqueras argentinas.
Entre enero y agosto, el país asiático se quedó con 76.152 toneladas a cambio de 304,3 millones de dólares. En término porcentuales, creció un 61,5 y un 80,9 por ciento respectivamente en relación al mismo período de 2017.
De esta forma, relegó a España al segundo lugar; aunque el país ibérico conserva un significativo volumen de negocios con la industria nacional. En los primeros ocho meses del año absorbió 52.908 toneladas por 269,4 millones de dólares.
Hoy el comercio con China explica el 23,4 por ciento del volumen total exportado por el sector y el 22,7 por ciento de las divisas que genera. Tanto el langostino como el calamar traccionan esta realidad, siendo las dos principales especies enviadas al «Gigante» de Asia.
El registro del Servicio Nacional de Seguridad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) cuenta con datos disponibles hasta mayo de 2018. De todas maneras, sirven para tener una radiografía de los recursos más vendidos a China.
- 13.047 toneladas de calamar entero
- 12.292 toneladas de langostino
- 738 toneladas de corvina
- 541 toneladas de pescadilla
- 432 toneladas de calamar tentáculo
- 198 toneladas de merluza
- 195 toneladas de centolla
- 191 toneladas de pez palo
- 146 toneladas de merluza de cola
- 143 toneladas de besugo
- 138 toneladas de calamar pastillas
- 123 toneladas de anchoíta
- 53 toneladas de rayas
- 24 toneladas de calamar vainas