El secretario de Bioeconomía de la Nación le dio el visto bueno al responsable de Pesca para que sea quien rubrique las determinaciones que se tomen a través del INIDEP.
La Resolución que avala la determinación de Fernando Vilella encomienda al Subsecretario de Recursos Acuáticos y Pesca Juan Antonio López Cazorla “la firma del despacho y la resolución de los asuntos del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), organismo descentralizado actuante en el ámbito de la Secretaría de Bioeconomía del Ministerio de Economía, al titular de la Subsecretaría de Recursos Acuáticos y Pesca de la Secretaría de Bioeconomía del Ministerio de Economía, médico veterinario Juna Antonio López Cazorla, hasta tanto se proceda a la designación del próximo Director del citado organismo”, tal cual indica lo rubricado por Vilella.
Para tomar esta determinación desde el Ministerio de Economía en definitiva, consideraron que ante la renuncia del Lic. Oscar Horacio Padín el 10 de diciembre último como director del Instituto es que el organismo puede tomar la decisión, avalado por el Decreto 1.063 del 17 de agosto de 2004 y su modificatorio, donde se aprobó la estructura organizativa del primer nivel operativo del Instituto Nacional, estableciendo sus Objetivos y Responsabilidad Primaria.
En el mismo sentido el Considerando destaca que a través del Decreto nro. 50 del 19 de diciembre de 2019 y sus modificatorios, se aprobó el Organigrama de Aplicación de la Administración Nacional centralizada hasta el nivel de Subsecretaría.
Además describe que es competencia de la Secretaría de Bioeconomía del Ministerio de Economía, entre otras las facultades, puede ejercer el control tutelar del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero, además de entender en la supervisión de los programas, proyectos y actividades del INIDEP.
Subraya la Resolución “Que existen diversas actividades imprescindibles y centrales que hacen a la colección de información científica de carácter pesquero para sustentar el asesoramiento a la Autoridad de Aplicación, en particular las campañas de investigación pesquero-oceanográficas planificadas anualmente y dirigidas a la evaluación de la abundancia y el conocimiento de la dinámica de las poblaciones de los principales recursos pesqueros.”
“Qué asimismo, merecen similar atención tanto la información proveniente de la operatividad de la flota pesquera argentina, obtenida por los Asistentes de Información Pesquera (ex-observadores a bordo) embarcados en los mencionados buques, como así también aquella que da cuenta de la estructura poblacional de la captura desembarcada recolectada a partir de los muestreos realizados en los distintos puertos del litoral marítimo argentino”, muestra la Resolución de reciente firma.
“Que los tópicos previamente mencionados requieren de urgente atención por parte de las Autoridades del precitado Instituto Nacional.”
“Que atento la renuncia del Director del aludido Instituto Nacional, resulta necesario para el normal desenvolvimiento de las tareas propias del referido organismo, tal como se viene señalando, encomendar al titular de la SUBSECRETARÍA DE RECURSOS ACUÁTICOS Y PESCA de la SECRETARÍA DE BIOECONOMÍA de MINISTERIO DE ECONOMÍA, el despacho de todos los asuntos relativos al cumplimiento de los objetivos establecidos en el mencionado Decreto Nº 1.063/04”, describe en el mismo sentido la determinación.
“Que el Servicio Jurídico permanente del MINISTERIO DE ECONOMÍA ha tomado la intervención que le compete.”
“Que la presente medida se dicta en ejercicio de las facultades conferidas por el Decreto Nº 50 de fecha 19 de diciembre de 2019 y sus modificatorios”, concluye el Considerando rubricado por Vilella.
De esta manera, y con la firma provisoria de López Cazorla, se evidencia que aún no se tiene determinado quién se haga cargo de un Instituto que desde la renuncia del Lic. Padín poco ha podido hacer, con escasos recursos, sobre todo a la hora de realizar las imprescindibles campañas de investigación, a lo que se suma un conflicto laboral que hoy por hoy lo único que tiene como cierto es que cada día se aletarga más y que no tiene una conclusión.
Ahora bien, desde aquel primer impacto de modificación de 82 puestos de trabajo, Cazorla, a pesar de la resistencia y violencia que han tornado a las últimas reuniones, en estos meses redobló la apuesta y persuadió con gestión, ocupación del problema y cierta generosidad para revertir y ser el nexo entre la investigación y las actuales autoridades económicas que pretendían desafectar personas con desconocimiento de su función.
Cazorla pudo readecuar una situación que al menos le era ingrata y rayana a lo indecorosa; el premio, un enorme gesto político, ser hoy quien decida sobre toda la Institución, aunque sea provisoriamente.