España prohíbe a sus arrastreros operar en ecosistemas sensibles de Malvinas

El Gobierno español retirará a sus buques arrastreros de los Ecosistemas Marinos Vulnerables (EMV) localizados en torno a Malvinas, de acuerdo a la información que trascendió mediante la prensa ibérica esta semana.
La medida involucra a uno veinte barcos de Vigo que regularmente faenan en esta parte del Atlántico Sur, donde las islas y su espacio marítimo circundante están envueltos en una disputa de soberanía a partir de la ocupación ilegal por parte del Reino Unido.
Dado el conflicto imperante en la zona no interviene ninguna organización regional de pesca que regule la actividad extractiva, de manera que las recomendaciones lanzadas por Naciones Unidas para proteger hábitats vulnerables en aguas profundas carecen de impacto.
Sin embargo, España ha ordenado que sus buques eviten las EMV de Malvinas. El presidente de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, lo destacó días atrás cuando participó en Nueva York de un taller para evaluar el resultado de las medidas proteccionistas de la ONU.
Llamado a otros países
El directivo incluso llamó a que Corea, China y Taiwán obliguen a sus flotas, que también trabajan en Malvinas, a restringir la pesca de fondo en los EMV y no compitan de forma desleal con el resto de los armadores.
“Nuestro país puede hablar en los distintos foros desde la autoridad moral de haber sido el primero (sino el único) que ha actuado de una manera autónoma tan contundente en ese caladero”, destacaron los españoles en un informe del sector privado.
Más que la voluntad ecologista de las partes, en la postura prevalece el cuidado de los mercados. Es probable que en un futuro no tan lejano las operaciones en EMV puedan ser encuadradas como pesca ilegal y así vedar el comercio de sus actores.
Mirada local
En cualquier caso, desde el Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (Cepa) recibieron con beneplácito la decisión de España.
“Es bueno lo que se está haciendo porque contribuye al ordenamiento de la zona. Es un indicio de que se van a cuidar las áreas más vulnerables”, definió el presidente de Cepa, Oscar Fortunato, al ser consultado por Pescare.com.ar.
Según entiende el dirigente, la Argentina debería integrarse a la toma de decisiones que involucren a Malvinas mediante algún tipo de organización regional sin ceder en los reclamos de soberanía.
Aunque dejó claro que hablaba desde una mirada empresaria: “Será en definitiva Cancillería quien deberá considerar si es bueno hacerlo. Nosotros damos nuestro punto de vista”, alertó.