El presidente del Consorcio Portuario de Quequén, Jorge Álvaro, convocó a una charla informativa junto a un sector de políticos, representantes gremiales y público en general, para comunicarles las intenciones de sumarse al mega proyecto.
Uno de los disertantes puso de relieve la importancia estratégica del Puerto de Quequén en comparación con otros puertos como Bahía Blanca o Mar del Plata, en lo que respecta a operaciones portuarias, según lo expresado por el profesor Pablo López.
De la misma manera señaló que tienen desafíos a superar, como por ejemplo la distancia hacia los aeropuertos y la falta de una terminal de tanques de combustibles, aunque presumen que podrían utilizar uno que se encuentra en las calles 16 y 59 (a unos 300 metros del puerto), el que podría ser el lugar ideal para las actividades en tierra relacionadas con la exploración, de acuerdo a lo que sostienen las autoridades.
El mismo disertante explicó que las operaciones offshore, se llevarán a cabo a aproximadamente 3.000 metros de profundidad, explicando que la fase inicial implica la creación de pozos, la toma de muestras para su estudio y el sellado posterior, tal como se viene detallando desde hace tiempo.
“Una vez que los estudios se completen y arrojen resultados favorables, avanzaremos a la etapa de desarrollo”, le dijo el profesor a los presentes, destacando que “toda la producción de petróleo se llevará a cabo en el mar, sin necesidad de tuberías u otros medios de transporte terrestre”.
En la reunión se recordó a los presentes que desde este punto hasta el inicio de la producción y extracción de petróleo y gas pueden pasar hasta cuatro años, instando a la provincia y al Puerto a prepararse adecuadamente para aprovechar esta oportunidad.
Si bien no era materia de la charla realizada en la vecina ciudad, y abordado el tema de la “conectividad” Mar del Plata – Quequén, no se mencionó el deplorable estado de la ruta provincial 88, la que con asiduidad registra accidentes en muchos tramos, con un gran porcentaje de víctimas fatales, debido al deterioro de la cinta asfáltica pero también al escaso ancho de la traza, descartando además, en períodos de lluvias, el anegamiento sobre la calzada que pone en peligro la transitabilidad de la misma.
Bien está que puedan participar otras ciudades vecinas en este resonante proyecto de la exploración offshore, el porte de los camiones de transportes, la velocidad que desarrollan y las casi nulas medidas de seguridad que posee la ruta, no haría otra cosa que seguir cobrándose vidas o en el mejor de los casos provocar graves accidentes si es que no se toma la determinación de construir urgentemente una autovía como la existente en el tramo Mar del Plata – Buenos Aires / Mar del Plata – Balcarce por ejemplo.
Cuestiones que se deberán resolver de inmediato si es que se quiere crecer y desarrollar no solo en Mar del Plata, sino en la región. Hoy se habla de una potencial extracción de 250 mil barriles de petróleo diarios, pero si no podemos resolver construir una nueva ruta, en algo estamos fallando.