Empresarios del medio local pudieron tomarle el pulso al mercado internacional de pescados y mariscos en la vigésimo séptima edición de la Seafood Expo Global, que se desarrolló en Bruselas entre martes y este jueves.
El stand de Mar Argentino, que reunió a una veintena de firmas, sirvió como centro de la experiencia. El espacio de 197 metros cuadrados recibió a compradores de diversos orígenes atraídos por la producción salvaje y natural de nuestro medio.
Sin embargo, el balance presenta grises. Aunque se presentó un buen clima de negocios para especies claves como calamar y merluza, se registró una menor demanda de langostino; de acuerdo a lo expresado por diferentes actores.
“El calamar está siendo demandado por los mercados a partir de la falta de producto; es decir, que faltó pesca. De momento, su demanda está firme, sin apremios”, señaló el empresario Antonio Solimeno ante la consulta de Pescare.com.ar.
En ese sentido, vale recordar que los desembarques en los puertos argentinos sumaron hasta el pasado 2 de mayo 91.534 toneladas; aún por debajo de las 108 mil de 2018. En tanto, fueron pobres las capturas de la flota extranjera en la milla 201.
Al mismo tiempo, la merma de cefalópodos sigue afectando a otros caladeros y especies similares como el todarodes del Pacífico, con lo cual en los pasillos de la muestra se escuchó que los precios seguirán subiendo en este segmento .
Merluza, estable
En cuanto a merluza, el panorama también muestra cierta estabilidad, con las exportaciones creciendo en volumen un 17,4 por ciento al menos durante los primeros dos meses del año; pero con retracción del 5,7 por ciento promedio en los valores de comercialización.
“Lo que es merluza, la demanda y oferta tiende a ser normal”, describió Solimeno. En una dirección similar se manifestó el director comercial del Grupo Veraz, Federico Angeleri: “Hay negocios con merluza”, sintetizó.
Aquí el flujo de hubbsi hacia los muelles fue algo mayor. Durante el primer trimestre de 2019 se desembarcó un global de 52.982 toneladas, un 13,8 por ciento más que durante el mismo período del año pasado, traccionado por la mayor actividad al norte del 41°.
Langostino, estancado
Más complejo es el escenario para el langostino a partir de los stocks que conservan los habituales compradores. Por caso, en el mercado europeo se registró una caída de 0,10 centavos por kilo a pesar del aumento de la demanda observada durante Semana Santa, según datos de FAO.
“El panorama no parece muy alentador. Veremos en el próximo mes, cuando comienza el verano en Europa, qué pasa”, expuso Angeleri. Por lo pronto, los desembarques del crustáceo siguen en alza y ya suman 52.494 toneladas con la continuidad operativa sobre el paralelo 41°.
“El mercado del langostino está lento, pesado. Habrá que esperar unos días que pase la feria de Bruselas para ver hacia dónde apunta la demanda y cómo se acomodan los precios”, evaluó Solimeno.