A través de una carta dirigida al Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA), Luis Núñez, el Grupo Veraz expresó su profunda preocupación por la compleja coyuntura económica que atraviesa la empresa.
Tras dos décadas de presencia en la ciudad de Rawson, la compañía enfrenta una encrucijada que amenaza la continuidad de sus operaciones.
En el comunicado, que lleva la firma del gerente del grupo pesquero, CPN Fernando Damboriana destacó que, aunque a lo largo de los años ha superado diversas adversidades, el escenario actual es particularmente adverso. Entre los factores que más inciden en esta crisis, Veraz señaló la drástica disminución de la rentabilidad en el sector del langostino y los altos costos salariales asociados a los convenios colectivos de trabajo. Estas dificultades han puesto en riesgo no solo la producción de langostino, sino también el procesamiento de otros productos fundamentales como la merluza y sus derivados.
“La situación es alarmante. A pesar de estar en plena temporada, hoy resulta difícil cumplir con los acuerdos firmados por la Cámara Argentina de la Industria Pesquera (CAPIP) en relación al langostino, lo que deja en una posición completamente inviable cualquier otro proyecto o iniciativa en ese marco”, puntualizó el grupo en su misiva, subrayando la gravedad de los desafíos que enfrenta.
En un intento por mitigar las consecuencias de esta crisis, Veraz ha implementado diversas estrategias en conjunto con el sindicato, incluyendo capacitaciones para fileteros y reconversiones contractuales buscando un perfil mas eficiente. Sin embargo, estas acciones no han sido suficientes para revertir el deterioro económico. Ante esta situación, la empresa ha tomado la decisión de plantear una renegociación de los Convenios Colectivos de Trabajo. Como medida inmediata, solicita con urgencia un acuerdo provisorio que le permita reactivar la producción de merluza, presentada como la única alternativa viable para preservar su operatividad.
“Nos vemos obligados a presentar esta solicitud porque, si no logramos encontrar una solución a corto plazo, otras medidas más drásticas, como un Procedimiento Preventivo de Crisis o incluso desvinculaciones y suspensiones por fuerza mayor, se harán inevitables”, advirtió el texto. La empresa enfatizó que estas opciones son vistas como un último recurso, al que se recurriría únicamente si las condiciones actuales no mejoran.
Asimismo, la carta subraya que, a pesar de los intentos por dialogar con los delegados de BONASUR, no se ha logrado generar una comprensión plena sobre la magnitud de la problemática.
BONASUR es un establecimiento que abarca una superficie cubierta de 2.300 mts2 y cuenta con un plantel de 180 personas que trabajan permanentemente en dos turnos. La cercanía al puerto favorece la elaboración de productos frescos de calidad superior como langostino entero continental, langostino sin cabeza y langostino EZ-PEEL, todos de única congelación.
Posee una capacidad productiva diaria de 20 toneladas de pescado congelado, y su capacidad de almacenamiento es de 400 toneladas de producto congelado y 80 de fresco.
En este contexto, el Grupo Veraz apeló directamente al liderazgo de Luis Núñez para alcanzar una solución que minimice el impacto negativo tanto en los trabajadores como en la producción.
Con 20 años de trayectoria en la región, el Grupo Veraz ha sido un pilar en la generación de empleo y en el desarrollo económico local. En su comunicado, la empresa reafirmó su compromiso con la preservación de los puestos de trabajo y con la continuidad de sus actividades, que han sido fundamentales para el crecimiento sostenido de la compañía.
“La situación es crítica, pero nuestro objetivo sigue siendo el mismo: seguir construyendo empleo de calidad, tal como lo hemos hecho durante estas dos décadas. Sabemos que es un momento difícil, pero confiamos en que, con la colaboración del gremio, encontraremos una salida que beneficie tanto a los trabajadores como a la empresa”, concluyó la nota, dejando abierta la posibilidad de un esfuerzo conjunto para superar esta crisis, siendo ese camino el que pueda abrir una ventana de negociación para aunar esfuerzos y atravesar el momento coyuntural que tiñe de rojo a toda la actividad.