Guiño para la merluza argentina: Brasil suspende la importación del pangasius vietnamita

Primero Rusia; ahora Brasil. En momentos de crisis e incertidumbre económica fronteras para adentro, las señales de aliento para la industria pesquera local llegan desde algunos mercados, en este caso desde el carioca nada menos.
La Cámara de Frigoríficos Exportadores de la Pesca (Cafrexport) informó que Brasil suspendió temporalmente la importación del pangasius vietnamita, el principal competidor de la merluza hubbsi en un segmento que el año pasado representó 80 millones de dólares para las pesqueras locales.
“La información fue confirmada por la cámara luego de que se recibiera la copia de la circular 767 del vecino país (…) Por razones de salubridad y falta de controles fitosanitarios, Brasil dejará de importar 10 mil contenedores anuales de dicha especie”, comunicó la entidad.
A partir de su fuerte penetración, el “panga” ha recibido diversos cuestionamientos sobre su calidad o condición; pero lo cierto es que las góndolas de Europa, Rusia o España lo tienen como protagonista. Brasil también estaba en esa ruta, hasta esta semana.
Los empresarios creen que ahora se abre una oportunidad para recuperar no sólo volumen; sino valores de venta. Aseguran que el objetivo pasa por lograr un reposicionamiento en el precio, que estaban retrasados en los números manejados por los importadores brasileros.
“La posibilidad de recuperar mercados de buen volumen está al alcance de la mano, por lo que se requiere la mayor predisposición para lograr cerrar acuerdos y negocios que se conviertan en más valor agregado y más trabajo para los marplatenses”, apuntaron.
Brasil fue durante 2013 el principal destino de las exportaciones argentinas de merluza, su participación aumentó en dos puntos respecto a 2012, alcanzando el 26 por ciento, según datos oficiales de la Subsecretaría de Pesca de la Nación.
Fueron 26.436 toneladas, fundamentalmente filets congelados (24.738 t.), por un valor cercano a los 80 millones de dólares. El precio promedio por tonelada rondó los 2.992 dólares.