La noticia viralizada refleja la presencia de un tiburón en la escollera Sur marplatense y horas más tarde la pesca de un ejemplar de similares características por parte de una de las tradicionales lanchitas amarillas.
Lejos de buscar inquietar a la población, sobre todo a aquellos bañistas que –en la medida de lo posible- disfrutan de las playas marplatenses, buscamos a través de PESCARE conocer más sobre los “condrictios”, nombre extraño para el común de la gente, pero que dentro del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero tienen sus especialistas.
Precisamente dos de ellos son el Dr. Jorge Colonello y la Lic. Natalia Hozbor quienes recibieron a nuestro portal para que podamos conocer más sobre la materia.
El grupo del Programa de Pesquerías de Condrictios del INIDEP está compuesto por cinco especialistas que tienen dedicación exclusiva.
¿De qué se trata el programa de Pesquerías de Condrictios? ¿Qué estudian y cuál es su misión?
JC: Nuestra misión es asesorar a las autoridades nacionales, respecto de estrategias y manejo de conservación. Para llegar a eso tenemos diferentes líneas de investigación vinculadas con edad de crecimiento, con reproducción, alimentación, distribución y análisis de la información pesquera.
Toda esa información se reúne y a través de otras personas que se dedican a realizar modelos de dinámica poblacional y en función de esos modelos, se presentan a las autoridades sugerencias de alternativas de manejo para determinadas especies.
¿Cuándo se habla de “condrictios” de que se habla puntualmente?
NH: Se habla de tiburones, de rayas, de chuchos. Hablamos de todos esos peces que son cartilaginosos. Lo que tiene este programa del que formamos parte es bastante reciente. Tradicionalmente el Instituto ha estudiado y estudia especies como la merluza, langostino, calamar y los condrictios (o tiburones) siempre fue como “acompañante” de otras especies. En el caso de condrictios nació originariamente con el programa costero.
¿A qué se debe que se le incorporó como un Programa aparte? ¿Cuál fue la necesidad de que lo trabajaran especificamente?
NH: Esto se debió a que las capturas y el interés por estos recursos se fue incrementando, entonces había que prestarle más atención y estudiarlo.
¿El estudio de estas especies está vinculado solo a la faz comercial?
NH: Esas son las prioridades y a raíz de esto es que vamos estudiando otras especies. Tenemos que tener en cuenta que hay más de 100 especies de condrictios. Es un dato que no se sabe mucho pero es la realidad.
JC: Hasta hace no muchos años por ejemplo las rayas se destinaba a harina de pescado. No tenían valor comercial y hoy las rayas son uno de los principales productos de interés comercial.
NH: No es que antes no se capturaban, sino que se capturaban y se descartaban o se utilizaban para harina como decía Jorge.
JC: En los inicios siempre hay algunas especies que tuvieron mayor “presión” pesquera como por ejemplo el gatuzo, el cazón, el pez ángel. Esas son especies “costeras”. Por eso a lo que hacía referencia Natalia, que el Programa surge dentro del programa de especies demersales costeras. A raíz de esta necesidad de dar respuesta a requerimientos a nivel nacional e internacional, porque son especies muy vulnerables, hay muchos requerimientos, sobre todo a nivel internacional respecto de qué está haciendo el país para el manejo y la conservación de estas especies. Fue entonces que el Instituto vio esto con buenos ojos al igual que lo hizo el Consejo, de que el Programa de Condrictios tuviese identidad propia.
Así surge en el año 2007, que se conforma el Grupo Condrictios como Programa, liderado por la Lic. Ana Massa quien fue la artífice de todo esto. Cuando nadie le daba importancia a los tiburones, ella sí.
No podemos dejar de mencionar la noticia sobre la aparición de un tiburón en estas horas en la costa. Uno o varios o el mismo…
JC: Apareció en principio un ejemplar en la Escollera Sur que pudo ser filmado por unos pescadores en horas de la noche. Desafortunadamente no es tan fácil identificar la especie porque es dificultosa la visión del video. Creemos que puede ser un escalandrum o bacota.
¿Esta sería una de las variantes más comunes de tiburones?
JC: Diríamos más frecuentes. Dentro de lo que son las más de 50 especies de tiburones que habitan en la Plataforma Continental Argentina, tenemos especies que son residentes permanentes. Hay especies que las podemos ver ocasionalmente y otras que aparecen estacionalmente. Por eso es común que en los meses de primavera-verano se incremente la frecuencia de ocurrencia de algunas especies de tiburones como por ejemplo el cazón, el escalandrum, el bacota, el gatopardo, que son tiburones muy costeros.
El tiburón que pescaron incidentalmente en las últimas horas en Mar del Plata, ¿a qué grupo pertenecería?
JC: Por lo que hemos podido ver en las imágenes sería un bacota.
¿Sería descabellado hablar de una invasión de tiburones como alguien sugirió?
NH: Aparecen y se los ve. Ocurre que cuando se hacen virales las imágenes parece mucho más. Verlos de cerca impresiona sin dudas. Tienen la típica fisonomía de un tiburón como se puede ver en televisión o en alguna película.
JC: Ocurre que esta especie de la que estamos hablando son frecuentes en esta época. Antes eran mucho más frecuentes. En la década del ’80 era muy frecuente ver en las costas de Mar del Plata o de Santa Clara del Mar, lo que se llaman “gancheras”, algo similar a donde se apoyan las hamacas de juegos. Ahí siempre aparecían colgados los tiburones que pescaban a “tiro de caña”.
Por suerte ha habido un cambio en la conciencia del pescador deportivo a raíz de que se empieza a conocer mucho más sobre la biología y la vulnerabilidad de estas especies. Hay un trabajo muy fuerte del parte del Instituto y de las autoridades para sensibilizar respecto de esto. De hecho, hoy por hoy, la pesca deportiva “con sacrificio” de los grandes tiburones, está prohibido en la Provincia de Buenos Aires.
Los tiburones, por su tamaño y su poder de natación, no son tan vulnerables a ser capturados en las redes de arrastre. Suelen caer algunos pero esquivan la red. En cambio cuando se utilizan las redes de cerco, cuando se pescan especies pelágicas y se “ceba” para que esas especies pelágicas vayan hacia la superficie, los tiburones se acercan y quedan atrapados por esa red de cerco.
¿El tiburón tiene alguna función específica en la cadena ecosistémica?
NH: La función principal que tiene son predadores “topes”, están en la parte más alta de la cadena. Mantiene la cantidad de peces dicho burdamente. Limitan la cantidad de otros peces que puedan haber. Estructuran las comunidades. Es como la pirámide alimenticia que nos enseñaron en la escuela primaria. Donde se disminuye la cantidad de tiburones es probable que se incrementen otras especies.
Si bien no es habitual encontrar un tiburón en las playas, a pocos centímetros de profundidad, ¿qué recomendación le darían a los bañistas o bien a los pescadores deportivos sobre todo?
NH: La idea es que si se ve que no están lastimados o se ve que están por morir, sería devolverlos al mar pero con alguna metodología porque no todo el mundo se va a animar a tocarlos, ni a agarrarlos. Depende también del tamaño, porque pueden ser muy pesados o muy grandes.
JC: Es muy poco probable que los tiburones estén nadando entre los bañistas y si aparece un tiburón moribundo no hay que acercarse. Siempre hacemos esta salvedad. Si nos preguntan si son peligrosos para el hombre tenemos que decir que no basándonos en las estadísticas. El único antecedente que tenés de ataque de un tiburón data de la década del ’50.
NH: Lo ideal sería que si están muertos o moribundos, que se comuniquen con el Instituto o con alguien de la Universidad. Eso nos puede ayudar a continuar estudiándolos.
JC: De hecho hace algún tiempo que venimos implementando un Programa de Marcación de Gatuzo. Básicamente lo que hacemos es salir con los tracker, usamos unos espineles, capturamos gatuzos y los “marcamos”. Le ponemos una marca con un código y los liberamos. Luego tenemos que esperar el reporte de los pescadores que capturen ese ejemplar marcado.
¿En qué zona han realizado esa marcación de gatuzo?
JC: Eso lo hemos hecho en la zona entre Santa Clara del Mar y La Caleta. Esta última salida que hicimos fuimos a probar a “la restinga” y tuvimos muy buenos resultados.
NH: La idea es que cuando lo recapturan nos digan “se capturó éste ejemplar, con esta marca”, para hacer un comparativo.
JC: El éxito del programa radica en que el pescador deportivo, artesanal, comercial, industrial, nos informe la recaptura. Nosotros conociendo el tamaño del ejemplar y la posición donde lo marcamos y la posición donde se recapturó y si podemos tener acceso al ejemplar, o la medida del ejemplar, en ese momento podemos saber la distancia mínima que recorrió ese ejemplar y por ejemplo cuanto creció.
Son parámetros, los migratorios o los de crecimiento que son muy útiles para lo que te mencionamos de los modelos de dinámica. Por ejemplo un tiburón que marcamos en Santa Clara del Mar apareció en “La Paloma” en Uruguay. Los resultados son bastante alentadores.
¿Eso es algo azaroso o ya tienen determinado que migren hacia ese sector?
NH: La idea de estos estudios es probar si pertenecen a poblaciones distintas o a stocks distintos. Con las campañas tenés visiones muy cortas en el tiempo y de esa manera saber, entre otras cosas, si el gatuzo del sur es el mismo que el del norte. Si bien es la misma especie, podemos saber si es la misma población o no.
Por Gustavo Seira