El gobierno italiano, liderado por Giorgia Meloni, ha presentado un recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea contra la medida que obliga a los buques pesqueros a utilizar sistemas de control electrónico remoto (CCTV y grabación de capturas).
Italia ya rechazó esta tecnología durante la votación del Reglamento en el Consejo, el mismo exige equipos de control electrónico remoto en buques de más de 18 metros que puedan incumplir la obligación de desembarque. Los Estados miembros pueden establecer obligaciones para buques menores, por el momento hay una moratoria de cuatro años hasta la entrada en vigor en 2028.
Desde la gente de mar italiana, los pescadores, sin dudas, esbozan que desde hace mucho tiempo es la nación más castigada por la normativa pesquera de la UE, incluso resistiendo embates de toda índole, desde que ambientalistas también se suman contra una actividad que sigue siendo el sustento de numerosas comunidades costeras desde hace más de tres siglos a lo largo de toda la costa Mediterránea y del Adriático.
Una foto destinada a permanecer en la historia. Esta es la foto simbólica que captura el hermanamiento nacido entre agricultores y pescadores, un acontecimiento importante que captura la unión de los dos oficios más importantes en la historia de la manufactura italiana. Esta foto que ya ha dado la vuelta a la web y fue tomada el 9 de febrero por Angelo Natarelli en la asamblea de los Agricultores de Foggia, captura el mundo real de #madeinitaly.
La pesca italiana ha bajado un 40% en la última década mientras desde el gobierno prometieron al sector diezmado con burócratas y medioambientalistas, impugnar la medida. El gobierno de Meloni no acepta decisiones que no equilibren la sostenibilidad ambiental y del medio marino sin el equilibrio de la sustentabilidad de las comunidades pesqueras que tanta cultura e historia poseen además de engrosar la cultura del trabajo desde la pesca hasta las principales mesas de los mas encumbrados restaurantes.
Por otro lado, se supo que la medida vulnera la privacidad de los pescadores y el principio de proporcionalidad, además de las normas de competencia desleal con las que serian tratados respecto a otros pescadores dentro de la misma zona de la Unión Europea.
Un ejemplo de cómo el Estado defiende intereses ante embates externos, algo que por estas latitudes jamás se impulsó, por el contrario, sin ser pesimistas ni aventureros, en nuestro país, justamente las autoridades siempre estuvieron del lado opuesto a quienes lo único que hicieron es trabajar, pescar e invertir.
Queda claro que entre ambientalistas, proteccionistas, burócratas de saco y corbata en Bruselas y medidas a favor de la restricción de pesca sustentando Áreas Marinas Protegidas, y Organismos Regionales de Ordenación Pesquera (OROP ), -un tipo de organización internacional que está dedicada a la gestión sustentable de recursos vivos del mar-; el sector pesquero en cualquier parte del mundo está destinado a su extinción, así lo expresan organizaciones de pescadores organizados en redes sociales como Pescatori a Tavola en Foggia, Italia. Cuanto por aprender.