El complejo naval de la ciudad, que integra astilleros, talleres y empresas de servicios, es visto por el Gobierno de la provincia de Buenos Aires como un sector con diversas oportunidades de crecimiento en el mediano y largo plazo.
Así se desprende del Plan Estratégico Productivo 2020 (PEP), elaborado por la administración Scioli y cuyos objetivos fueron presentados esta semana por el ministro bonaerense de la Producción, Ciencia y Tecnología, Cristian Breitenstein.
Según se informó, el programa productivo es una herramienta pensada para la generación de empleo y agregado de valor, que incluye como puntos principales el desarrollo con una lógica equitativa. Además, apunta a la sustitución de importaciones.
«Hemos dividido el territorio en ocho subespacios con cuarenta y seis cadenas de valor con industrias y subindustrias estratégicas a las cuales hemos decidido jerarquizar, apoyar y generar incentivos para desarrollar de la mejor manera«, detalló Breitenstein.
Dentro del subespacio costero, se destaca la industria naval de Mar del Plata. El PEB 2020 describe que el sector está compuesto por tres astilleros y pequeñas empresas vinculadas a la pesca, generando un tejido productivo de trescientas empresas.
En ese marco, el trabajo puntea las oportunidades para el desarrollo de la cadena en los próximos siete años:
- Contexto macroeconómico y global favorable para el desarrollo dela actividad naval.
- Apertura a nuevos mercados para la exportación.
- Mayor involucramiento del Estado en materia de financiamiento y capacitación para promover el desarrollo del sector.
- Capacidad ociosa de construcción en la Argentina.
- Requerimientos de mayor seguridad y tecnología para la pesca selectiva.
- Posibilidades de establecer alianzas estratégicas y acuerdos de cooperación con terceros países.
- Amplio mercado interno. Demanda de todo tipo de embarcaciones.
La mirada contrasta con un presente complejo impuesto por la falta de dragado (quedaría superado en el primer semestre de 2014), la incertidumbre que rodea al astillero Contessi por la deuda que mantiene con el Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata y la inactividad del astillero Unión, originada en un pase de manos poco transparente de la empresa.
Por otro lado, queda pendiente la tarea para desarrollar en profundidad las líneas del plan: “Se articularán encuentros provinciales para abordar la realidad de cada sector con la participación de gobiernos locales, empresarios y las universidades”, explicaron las autoridades.
La agenda podría incorporar, por caso, la renovación parcial de la flota y el desafío que supone la integración con Brasil, eje del Mercosur.
De la misma manera, se determinaría en conjunto la incorporación de otras industrias. En ese sentido, llama la atención que la pesquera no esté integrada al proyecto de manera directa, cuando la provincia concentra el sesenta por ciento de los desembarques y pose un importante cluster productivo.