Finalizó la temporada de pesca de langostino en aguas nacionales sin que la provincia de Río Negro hiciera uso del cupo social extraordinario de 3.500 toneladas de langostino que le fuera solicitado mediante nota del 31 de julio pasado al Subsecretario de Recursos Acuáticos y Pesca.
La administración pesquera provincial con la firma de su representante, el Dr. Sergio Paleo, había solicitado la creación de esta reserva social para mitigar los efectos de la denominada «emergencia pesquera» que oportunamente esa cartera había promulgado mediante Decreto Provincial N° 480/2023 firmado el 10 de mayo del 2023, declarando la emergencia pesquera en todo el Golfo San Matías.
La Secretaría de Pesca de Río Negro elevó una solicitud a la Subsecretaría de Recursos Acuícolas y Pesca de la Nación, solicitando la distribución de parte de dicha cuota. Sin embargo, el trámite fue frenada su instrumentación por la entidad nacional, bajo la dirección de Juan Antonio López Cazorla, y el expediente no avanzó hacia el Consejo Federal Pesquero para su tratamiento.
Este estancamiento evitó potenciales acciones judiciales sobre la cuestión, dado que la creación de esa cuota social fue objeto de severas críticas por parte de sectores empresariales, que solicitaron mediante sendas notas al CFP el pedido vista/acceso al expediente que originó su implementación. Dicho pedido quedó registrado en el Acta CFP Nro. 9/2024.
Cabe destacar que la asignación de esta «cuota social extraordinaria» surgió en un contexto político controvertido, marcado por acusaciones de un intercambio de favores entre el gobierno libertario nacional y la administración de Alberto Weretilneck. Ese mismo día, legisladores provinciales rionegrinos facilitaron la aprobación de la Ley de Bases y el paquete fiscal en el Congreso.
Es importante subrayar que la reserva social estaba destinada exclusivamente a la pesca en la temporada de langostino en aguas nacionales de 2024, lo que impide a Río Negro solicitar una extensión del cupo el próximo año.
Desde el inicio, la creación de esta cuota estuvo rodeada de controversias. El voto favorable de López Cazorla, alineado con representantes del Poder Ejecutivo como Miguel Schmukler, Martín Fernández, Paola Gucioni y Pablo Mazzoni, junto al apoyo de Santa Cruz a través de Harold Bark y el respaldo del representante de Río Negro, Sergio Paleo, permitió su aprobación. En oposición votaron los representantes de Buenos Aires, Carla Seain, y de Tierra del Fuego, Carlos Cantú, mientras que Andrés Arbeletche de Chubut optó por una abstención.
El 31 de julio, Paleo había solicitado mediante una nota presentada al propio Juan Antonio López Cazorla, la asignación de 300 toneladas para el BP Franca, 200 toneladas para el BP Don Agustín, 800 toneladas para el BP Viernes Santo y 150 toneladas para el BP Temerario. No obstante, el pedido quedó demorado en el despacho de López Cazorla. Con la conclusión de la temporada, el cupo extraordinario de 3.500 toneladas quedó completamente desaprovechado y dejando un precedente para futuros reclamos. Primó la cordura conforme a derecho.