En concordancia con la Unión Industrial Argentina que emitió un documento titulado Anticipo extraordinario de impuesto a las ganancias a empresas: nuevo incremento de la presión tributaria al sector formal; la pesca tiene los mismos inconvenientes como sector industrial manufacturero y exportador.
La decisión del Gobierno de cobrar un anticipo extraordinario de Ganancias a las empresas brinda más presión tributaria, agudiza la incertidumbre y podría frenar la tan esperada recuperación de la economía en general, con imprevisibles impactos en los sectores laborales.
Es evidente la recuperación económica de nuestro país debe necesariamente surgir del desarrollo productivo con generación de empleo formal, mano de obra, e inversión, que sin dudas se verán mermadas por estas resoluciones inesperadas e imprevisibles.
Los incrementos de la presión tributaria, la carga financiera y la falta de financiamiento y crédito al sector productivo industrial del clúster pesquero dificultan el cumplimiento de este objetivo inicial.
Si esta norma RG 5248/2022 publicada el lunes pasado estableciendo un anticipo adicional al impuesto a las ganancias se lleva adelante provocaría varios inconvenientes sobre un sector que desde hace años no tiene crédito y que creció a fuerza de trabajo e inversión propia. Hoy, presenta algunos puntos candentes que hay que considerar,
a).- El impacto negativo sobre el sector productivo formal.
b).- La falta de previsibilidad debido que esto no estaba presupuestado dentro de los esquemas empresariales.
c).- Un incremento del costo financiero de las empresas que no gozan de caja en un año difícil en materia de comercialización exterior.
d).- Compromete la situación a futuro, ya que adelanta compromisos que las empresas habían previsto para el año 2023, desfinanciando y precipitando ventas a precios viles.
La medida, RG 5248/2022 publicada el lunes pasado, la AFIP estableció un anticipo adicional de impuesto a las ganancias para las empresas que cumplan determinados requisitos: será del 25% del impuesto del año anterior o del 15% del resultado impositivo en caso que no haya habido impuesto a pagar. “En ambos casos, abarca a empresas que hayan tenido impuesto a pagar igual o mayor a $100 millones o resultado impositivo antes de quebrantos mayor a $300 millones”.
Específicamente para el sector pesquero, estimar anticipos de pago afectado por las ganancias, respecto al año pasado es desconocer la fotografía de las empresas en periodos tan disímiles como el 2021 y el actual 2022.
Este año y a partir de febrero-marzo las empresas del sector han sufrido un violento cambio en la estructura de costos e ingresos; ventas aparejadas al mercado internacional con un tipo de cambio débil, y costos atribuidos a la ola desmedida inflacionaria en el mercado interno, por cuanto estos, aumentaron sustancialmente vinculados al IPC.
Los costos en dólares se han multiplicado enormemente, la mano de obra con un dólar menos vivaz que las paritarias indexadas después de la aceleración del proceso inflacionario iniciado en febrero de este año, junto a la falta de ventas en mercados internacionales, donde los precios de algunas especies han bajado precipitosamente, es al menos fomentar la desinversión, y la ralentización de toda la industria que componen el clúster pesquero. Aun, cuando se está en vísperas de enfrentar nuevamente paritarias que podrían situarse en al menos un 40% mas, como se desprendió extraoficialmente en la reunión de gremios, días atrás, en la sede de Capitanes.
El Estado busca como una aspiradora, barrer fondos espurios dentro del sistema financiero, con el agravante que siempre el sistema formal es el que asume los costos de estas políticas sumamente restrictivas que bien podrían quebrar el equilibrio financiero del sector pesquero.
Ver RG 5248/2022 clic en el vínculo https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/268609/20220816