El Buque Tanque Morholmen ha vuelto a operar tras completar con éxito una serie de reparaciones necesarias en el astillero Tandanor, con el objetivo de garantizar su correcto funcionamiento y prolongar su vida útil. Las intervenciones, que abarcaron diversas áreas técnicas del buque, fueron esenciales para asegurar su óptimo rendimiento en el mar en un mantenimiento preventivo previsto según calendario de inspecciones.
Este buque tanque, de ingreso permanente a puerto de Mar del Plata, sector posta de combustibles, es de uso fluvial construido en el año 2011 de acuerdo los últimos estándares tecnológicos.
La embarcación se encuentra apta para el transporte de productos derivados del petróleo y químicos. Frecuenta recorridos que alcanzan los puertos de La Plata – Dock Sud / San Lorenzo – Mar del Plata– Comodoro Rivadavia – Puerto Deseado – Ushuaia.
Tiene una eslora de 144 metros, 23m de manga, 12.40m de puntal y un calado de 8.90m cuyo desplazamiento es de 17500 toneladas.
En el área de mecánica, se realizaron trabajos fundamentales, entre los que destacan el desmontaje y montaje de la hélice de paso fijo, así como el cambio de los sellos de la bocina externa, lo que garantizó la estanqueidad de la embarcación. Además, se renovaron los ferodos de los cabrestantes de ancla de babor y popa, y se repuso la cinta porta ferodo del cabrestante del ancla de babor. También se llevó a cabo un recorrido integral de las válvulas de casco y descarga, y se renovó la bulonería de las tapas de tanques, asegurando su cierre adecuado y la durabilidad de estas estructuras.
En el área de carenado, se intervino en las marcas de calado de la sección media de la banda de babor, que fueron completamente repintadas para garantizar una visibilidad óptima y cumplir con las normativas de señalización para una navegación segura.
Por su parte, las tareas de calderería incluyeron reparaciones y refuerzos en varias zonas del buque, como el desmontaje y montaje de guardacabos, la soldadura de contretes faltantes en las cadenas de ancla, y reparaciones en el sistema de ventilación del guardacalor, la escala real de babor y las barandillas de cubierta.
En cuanto a la cobrería, se realizó una intervención integral en el sistema de tuberías del Morholmen. Entre las principales tareas realizadas, se destacó la renovación de la tubería del circuito de agua al condensador, así como la reparación de las tuberías de descarga de agua del condensador y del sistema de bombas de agua de mar. También se trabajó en el codo de descarga de aguas negras y el codo de descarga del enfriador de baja temperatura (LT) en la banda de babor, garantizando así el correcto flujo de agua y la operatividad de estos sistemas esenciales.
Estas reparaciones y renovaciones fueron clave para el retorno al servicio del buque tanque, asegurando su capacidad operativa y mejorando la seguridad y eficiencia del buque en sus actividades de transporte de combustibles.