Entre los armadores de buques fresqueros y costeros de Mar del Plata se multiplican los gestos de fastidio. La medida de fuerza que lleva adelante el Siconara está dejando sin actividad a esas dos porciones de flota en plena zafra de langostino. Al mismo tiempo, está impidiendo que operen sobre merluza o variado costero.
Por estas horas, circula un informe elaborado por la Cámara de la Industria Pesquera Argentina (Caipa) donde se analizan los pormenores del cortocircuito entre armadores y delegados de conductores navales con una conclusión inquietante: excede lo salarial.
“El pedido que realiza (el gremio) es de imposible cumplimiento, lo que demuestra que tiene que haber otra intención en el conflicto que se plantea”, expresa un de los párrafos salientes del documento, al que tuvo acceso Pescare.com.ar.
En la cámara entienden que el hecho de haber solicitado percibir ingresos sin el descuento del Impuesto a las Ganancias y el de aportes jubilatorios opera como muestra; sobre todo en una rama laboral con sueldos que pueden superar los 350 mil pesos.
“Nos encontramos con que un grupo de personas que no son de Mar del Plata y que dicen pertenecer al Siconara están presionando y amenazando a los conductores para que no salgan a navegar y han logrado parar tres o cuatro barcos en el puerto local”, advierten.
Maldonado, en el centro de la escena
La referencia apunta al grupo que encabeza Jorge Maldonado, el delegado gremial de Rawson, apoyado por el secretario general, Armando Alessi, en un contexto particular que incluye elecciones para renovar las autoridades sindicales de la institución.
“No se comprende cómo puede ser que una persona que dice ser delegado en un puerto del sur venga a cuestionar el acuerdo que firmó la delegación Mar del Plata y que viene firmando desde hace muchísimos años sin que se haya sido cuestionado en momento alguno ni por el Siconara central, ni por las delegaciones”, evalúan las empresas.
En ese sentido, vale recordar que en mayo pasado el Siconara local junto a Simape, Somu y Centro de Patrones sellaron con la Cámara de Armadores la pauta salarial 2018 con un aumento del 22 por ciento y un valor de langostino de 1,40 dólares a los fines de la liquidación. Tiempo después, la Asociación de Capitanes acordó en forma particular un incremento del 20 por ciento remunerativo*.
“Ahora, Maldonado desde Rawson pide que se le abone al primer conductor el equivalente a 26.50 pesos por cajón neto de bolsillo (…) además solicita una modificación en los puntajes vigentes desde hace más de treinta años”, cuestionan.
En Caipa juzgan que esos aspectos deben ser tratados en una eventual discusión de convenio colectivo debido también a la importancia que tienen los puntajes para establecer la remuneración del resto de los trabajadores de abordo.
Ver también
Más de 50 mil cajones de langostino llegaron al puerto local en tres días