La zafra 2014 de anchoíta no se caracterizó por su volumen. De acuerdo a la estadística que maneja la Subsecretaría de Pesca de la Nación, se descargaron sólo 13.948 toneladas, generando algunos baches en la conserva.
En este contexto, algunos armadores de barcos locales decidieron ir tras la engraulis en este arranque de mayo. Entre los que colocaron la red de media agua están el “Hampón”, “Orión I”, “Tesón”, “Araucania”, “Salvador R” y “Belvedere”.
“En mayo siempre se da un poco de pescado. Se intenta, si después se corta veremos más adelante, a partir de julio o agosto, cuando generalmente arranca la temporada”, resumió un operador costero consultado por Pescare.com.ar.
El año pasado, por caso, durante mayo se desembarcaron 16,6 toneladas. En ciclos anteriores el mes fue un poco más generoso. En mayo de 2013 se alcanzaron las 103 toneladas y en el mismo período de 2011, 551 toneladas.
El Inidep reconoce la presencia del recurso en esta época del año también como menor: “Una arribazón secundaria de cardúmenes de adultos al área pesquera de Mar del Plata se registra habitualmente durante el invierno (mayo-julio)”, dicen los científicos.
Sin embargo, el instituto no dispone de datos actualizados sobre el estado del recurso. Pese a la merma que se registró el año pasado, el paro del personal embarcado impidió realizar una campaña de investigación que indague en las posibles causas.
De cualquier manera, hasta aquí se ha mantenido el carácter estacional de la explotación. Los desembarques vienen alcanzando su pico entre septiembre y octubre, con una tendencia a disminuir en los últimos meses del año.
Un grupo de barcos locales va por las concentraciones de engraulis que en ocasiones se acerca al área pesquera de Mar del Plata durante mayo.
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