A帽o a a帽o Mar del Plata se sigue destacando a trav茅s de sus astilleros, que son convocados por armadores de otras provincias que no es la bonaerense, para la construcci贸n de buques y reparaciones, con una demanda tal que en ocasiones deben esperar meses para que sus barcos sean atendidos. Eso tiene una sola respuesta: cumplimiento y calidad de trabajo.
No son solo los astilleros quienes forman parte de la industria, sino diversos talleres y un sinf铆n de trabajadores que dedican d铆a a d铆a sus conocimientos para un sector altamente productivo, pero que lo comprende la situaci贸n econ贸mica actual, con el ya consabido retraso cambiario que no logra un emparejamiento que le permita dar respuestas a sus incansables pedidos.
Hoy la Industria Naval argentina no tiene f铆sicamente a uno de sus grandes actores, el m谩s reconocido, pujante e incansable de un sector al cual le marc贸 el camino: Federico Contessi.
Escasean los adjetivos calificativos, los reconocimientos y el ejemplo de c贸mo se puede desde el empe帽o, la fuerza y los sue帽os, hacer una gran empresa que muestre el sendero.
Esta Industria Naval Argentina tiene sobrados m茅ritos para ser reconocida internacionalmente, las muestras est谩n a la vista. Vasta con mirar la creaci贸n del Ing. Horacio Tettamanti ideando un astillero que posibilit贸 la construcci贸n de dos buques 煤nicos desde el puerto marplatense: 鈥淟uigi鈥 y 鈥淎nita鈥.
No menos es la dedicaci贸n y compromiso que le ponen desde Necochea profesionales de la talla del Ing. Naval Hugo Obregozo, que en silencio y con bajo perfil, posibilita el asesoramiento, reparaci贸n y construcci贸n de buques desde el viejo astillero Vanoli, que no le van en zaga a ning煤n otro.
Detr谩s de tantas grandes obras y de los trabajos en apariencia peque帽os, vaya tambi茅n el recuerdo y el reconocimiento para otro incansable como lo fue 鈥淐hiquito鈥 Godoy, otro de los actores que mostr贸 que con esfuerzo se pueden hacer grandes cosas, as铆 se explica la demanda de TPA.
Est谩 m谩s que claro que cuando se habla de Industria Naval la mirada no se debe circunscribir solamente a los astilleros. Numerosos talleres con una enorme trayectoria en el puerto marplatense son parte fundamental de la dedicaci贸n, compromiso y d铆as de trabajo que en ocasiones, a demanda, no saben de fines de semana, feriados o per铆odos estivales.
Ampliando la mirada, el reconocimiento tambi茅n es para aquellos que brindan su soporte y profesionalismo desde otros lugares allende Mar del Plata: el Gran Buenos Aires, Rosario, Bah铆a Blanca, Ensenada, Rawson, San Nicol谩s, son claros ejemplos de lo amplio y provechoso que es el sector naval, no terminado de reconocer desde hace d茅cadas en nuestro pa铆s.
Cap铆tulo aparte pero vinculado, es la formaci贸n que se brinda desde una de las casas de altos estudios marplatense como lo es la UTN 鈥 Regional Mar del Plata, con su carrera de Ingenier铆a Naval, proyectando con cada colaci贸n a ingenieros que son orgullo no solo para la ciudad, como ocurre con otras ciudades donde se dicta la carrera de Ingenier铆a Naval, proyectando profesionales que son convocados desde otras latitudes para desarrollar proyectos de calidad.
Hasta no hace muchos a帽os, algunos agoreros pensaban y manifestaban que no era una industria que pudiese darle trabajo a todos. Afortunadamente estaban equivocados y a la vista est谩 su yerro.
Pero recordemos, el 12 de septiembre de 1961, el Presidente de la Naci贸n Arturo Frondizi firm贸 un decreto que dio inicio a un ambicioso plan de renovaci贸n de buques mercantes en Argentina. Esto marc贸 el comienzo de un periodo de prosperidad en la industria naval del pa铆s, convirti茅ndola en la m谩s productiva de Latinoam茅rica. Sin embargo, este periodo de buenos vientos se vio afectado por la crisis de fines de los a帽os 80 y la apertura indiscriminada de la d茅cada del 90.
Hoy, parad贸jicamente en nuestra Argentina pendular, nos encontramos discutiendo nuevamente la importaci贸n de buques del extranjero, a pesar de la existencia de astilleros p煤blicos en desuso o con capacidad ociosa y de la Ley Nro. 27.418/2017, que establece que los buques necesarios para los entes del Estado deben ser construidos en el pa铆s. La historia ha demostrado que es posible construir con mano de obra argentina productos de calidad internacional.
Esperamos que estas intenciones de importaci贸n indiscriminada no avancen y que el pr贸ximo gobierno mantenga pol铆ticas de incentivo para la industria naval, pero con estabilidad macroecon贸mica. 驴Ser谩 mucho pedir?. Tambi茅n es fundamental que los actores de esta industria luchen por principios sectoriales, donde la industria naval y la pesquera busquen aunar esfuerzos para avanzar por la misma senda que la emprendida hace unos pocos a帽os.
Este 12 de septiembre la Industria Naval, con un acto a celebrarse en la Ciudad Aut贸noma de Buenos Aires, mostrar谩 que est谩 para m谩s, para mucho m谩s, pero hay que seguir ayud谩ndola.






