El sector pesquero de Mar del Plata atraviesa una etapa marcada por incertidumbre debido a la poca receptividad en cumplir con la redistribuci贸n de CITC de merluza hubbsi, 煤nica especie que aun no se redistribuy贸; no obstante, a esta constante preocupaci贸n se le suman las tensiones derivadas de la reciente imposici贸n de multas y sanciones por parte de la Direcci贸n Nacional de Control y Fiscalizaci贸n Pesquera del ejercicio 2020 al 2022.
Estas medidas correspondientes a presuntas infracciones ocurridas durante la temporada de pesca de langostino de aquellos a帽os, hab铆an quedado 芦cajoneadas禄 despu茅s de sendas presentaciones que determinaron lo poco veraz, la falta de sustento t茅cnico din谩mico y operativo de la pesca y por ser infundado en una perspectiva de cuatro mediciones puntuales de Monpesat por hora; o peor a煤n; en presunciones e inferencias que escapan al conocimiento de la din谩mica f铆sica y cinem谩tica de un barco en alta mar, han generado un clima de malestar entre los armadores locales, exacerbado por los montos imposibles de pagar como adem谩s un fundamento poco veros铆mil desde la 贸ptica jur铆dico formal.
En este contexto, la estabilidad del sector se encuentra gravemente amenazada, mientras la posibilidad de un litigio judicial extraordinario contra exfuncionarios que ya no ocupan sus cargos emerge como el 煤ltimo recurso para los afectados.
En el centro de la controversia, las sanciones impuestas se fundamentan en la aplicaci贸n de una presunta violaci贸n a la Resoluci贸n 7 y la Resoluci贸n 171 de 2018, dos medidas de manejo y administraci贸n de la pesquer铆a de langostino. Entre las acusaciones principales destacan la pesca en horarios no autorizados, el exceder el l铆mite de 72 horas permitido por marea y operar a velocidades de arrastre superiores a los 3,5 nudos. Estas imputaciones, que han resultado en multas de hasta 140.000 Unidades de Pesca (UP)鈥攗n equivalente fluctuante seg煤n el precio del gasoil hoy en $1244)鈥攈an alcanzado cifras que oscilan entre los 40 y 80 millones de pesos por embarcaci贸n. Adem谩s, a estas sanciones econ贸micas, de prosperar, se suman la posibilidad de suspensiones preventivas de 30 d铆as, afectando a barcos emblem谩ticos de la flota fresquera de Mar del Plata cuya pesca objetivo es el langostino en aguas bajo jurisdicci贸n nacional.
Mientras algunas empresas armadoras han optado por allanarse a las sanciones cunado han llegado oportunamente debido a la insignificancia de lo exigido economicamente hablando, ademas, negociando reducciones o planes de pago, otras han presentado descargos en un intento por revocar las imputaciones f谩cilmente incomprobables que alegan motivos justificables para la extensi贸n de su marea, evidencian la complejidad de las operaciones y los desaf铆os log铆sticos y din谩micos del entorno marino (abatimiento, mareas, deriva, condiciones de mar, eventos clim谩ticos, etc., etc., etc). Sin embargo, las imputaciones por otras irregularidades, como la velocidad de arrastre y la pesca nocturna, se mantienen vigentes, intensificando la percepci贸n de arbitrariedad en la aplicaci贸n de las normativas.
El malestar en el sector no se limita a las sanciones econ贸micas. La interpretaci贸n de las normativas por parte de las autoridades ha sido fuertemente cuestionada.
Oportunamente C谩maras del sector representativas de este segmento de flota, y otros armadores sostienen que se han implementado medidas sancionatorias que exceden las disposiciones legales. Entre las cr铆ticas destacan la falta de consideraci贸n de los tiempos de espera en puertos saturados, errores en la medici贸n de la velocidad de arrastre y la imposici贸n de requisitos operativos que carecen de sustento jur铆dico claro. Estas discrepancias han llevado a los armadores a calificar el accionar de la Direcci贸n de Pesca del ejercicio anterior (2019-2023) como abusivo, arbitrario y lesivo para los intereses de la flota fresquera. Hoy, algunas cuantas multas de aquellas, fueron llegando con la sorpresa de hasta un monto de 200 Millones de Pesos, valor sin dudas, confiscatorio frente a lo presuncion de una inferencia de eventual infracci贸n.
La amenaza de judicializaci贸n del conflicto por parte de armadores que ya han manifestado mediante intercamaras su preocupaci贸n al CFP es un s铆ntoma de la gravedad de la situaci贸n. En su presentaci贸n a las autoridades, argumentan que las normativas actuales no contemplan adecuadamente las realidades operativas del sector y que las imputaciones no solo son infundadas, sino que tambi茅n afectan la sustentabilidad econ贸mica de las empresas y el empleo en la regi贸n. Alegan, adem谩s, que ciertas disposiciones contradicen la Ley Federal de Pesca y exigen la revisi贸n inmediata de las resoluciones en cuesti贸n.
La resoluci贸n de este conflicto se presenta como un desaf铆o complejo para el actual Director Nacional de Control y Fiscalizaci贸n Pesquera Dr. Alejandro Bonicatto, pues hereda una problem谩tica que si bien no es ajeno, solo resta su participaci贸n en la resoluci贸n de la misma. Por un lado, las autoridades de Pesca insist铆an en que las medidas son necesarias para garantizar la sostenibilidad del recurso y el cumplimiento de las normativas vigentes. Por otro lado, los armadores argumentan que la aplicaci贸n de sanciones desproporcionadas amenaza la viabilidad del sector. Mientras tanto, el recurso del langostino, vital para la econom铆a local, se encuentra en el centro de una disputa que pone en riesgo no solo la estabilidad econ贸mica del sector, sino tambi茅n la confianza en las instituciones regulatorias.
Este escenario, caracterizado por tensiones crecientes y un clima de incertidumbre, demanda una soluci贸n equilibrada y razonable. La preservaci贸n de los recursos pesqueros, junto con la sustentabilidad econ贸mica y social del sector, debe ser prioritaria para evitar que este conflicto se traduzca en un impacto irreversible para la industria pesquera primaria extractiva de Mar del Plata.






