Dejaron en libertad a la cúpula del SUPA Chubut. Habían solicitado la prisión preventiva pero los argumentos fueron rechazados. Continuarán procesados pero no detenidos.
Los fiscales chubutenses Florencia Gómez y Leonardo Cheuquemán habían solicitado la prisión preventiva a los cinco gremialistas del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos por la causa que se les sigue por pedidos de coimas y extorsión en perjuicio de empresarios pesqueros.
Luego de desarrollarse una larga audiencia el día viernes, los argumentos esgrimidos para que los sindicalistas continúen detenidos, fueron rechazados por la jueza de garantías Karina Breckle, dado que consideró que no existe entorpecimiento de la investigación la libertad de los acusados.
De todos modos Alexis Gutiérrez, Bruno Vera, Juan Carlos Inaleff, José Zambrano y Claudio Villarroel seguirán procesados en la investigación por los delitos de amenazas y extorsión contra seis empresarios de la estiba de Chubut.
La solicitud de la fiscalía fue la prisión preventiva para cumplirse en un centro detención, pero la magistrada consideró que los argumentos expuestos no eran suficientes, al considerar por un lado que no existe entorpecimiento en la investigación y que el Ministerio Público Fiscal no presentó medida coercitivas en tiempo procesal oportuno, según se señaló desde el propio juzgado.
De todos modos, los fiscales Cheuquemán y Gómez, solicitaron la prohibición de acercamiento de los imputados hacia los denunciantes en forma personal, como así tampoco podrán hacerlo a su núcleo familia, domicilios particulares, empresas y lugares de trabajo de los denunciantes.
La audiencia tuvo su inicio el día viernes, pero al extenderse más de lo previsto, se solicitó un cuarto intermedio para que la misma tuviera continuidad el día sábado, para que la jueza que entiende en la causa contara con el tiempo suficiente para analizar la determinación a tomar con respecto al pedido de prisión preventiva en un centro de detención.
Además de los cinco imputados, se había solicitado una apertura de investigación contra el vocal del SUPA Chubut Cristian Pérez, la cual fue rechazada luego de la presentación llevada a cabo por la empresa “Aravales”.
El resonante caso y las distintas denuncias fueron presentadas por titulares de empresas de estibaje y armadores pesqueros, tal el caso de Raúl Cereseto, Ezequiel Jaroslavsky, Sergio Pantano, Rafael Suárez, Oscar Aravales y Luis Santander, quienes a través de distintas pruebas, manifestaron haber sido extorsionados por la cúpula sindical del SUPA, y desde ahí se desprende todo el proceso que continuó con varios hechos de violencia.
Por caso, el empresario Cereseto fue víctima del incendio de su camioneta particular en la puerta misma de su domicilio, poniendo en riesgo no solo la propiedad sino a los ocupantes de la misma, ademas del impacto psicológico de los integrantes de la familia, donde hay menores que tendrán en sus retinas, uno de los hechos más violentos en democracia contra la integridad de un empresario, dato no menor. Hecho que lamentamos y nos solidarizamos oportunamente desde esta redacción.
Días más tarde, desde su arresto domiciliario, el propio Alexis “Gallo” Gutiérrez, ante un grupo de estibadores les manifestó a viva voz: “si quieren guerra, guerra les vamos a dar”.
De momento las medidas que dispuso la jueza Breckle se extenderán al menos por cinco meses más, lapso en el cual los fiscales deberán tener finalizada la investigación para presentar ante la magistrada.
Una vez que se dispuso la libertad de los imputados –que seguirán procesados- los sindicalistas salieron del juzgado, donde los aguardaban un grupo de personas, que cantaron y vivaron por los ya no detenidos, cantando “el SUPA no se vende” en reiteradas ocasiones, solicitando fotografiarse con el Gutiérrez y aplaudiendo la determinación de la jueza Breckle, tras lo cual, el propio titular del gremio, improvisó un discurso en plena calle.