En el destacado dique flotante de SPI Astilleros, y luego de doce meses de inactividad, el remolcador Remarsa I se encuentra en la etapa final de una intervención técnica largamente esperada. La obra, que concluirá en el transcurso de la semana, responde a la reparación de su sistema de propulsión azimutal de banda de babor, afectado durante una maniobra de alta exigencia operacional.
El incidente que motivó la parada forzada se produjo en circunstancias meteorológicas adversas, cuando la unidad ejecutaba un remolque a instancias del ingreso al puerto local, durante la operacion y debido a fuertes vientos del cuadrante Este, para impedir que un buque pesquero impactara contra la escollera norte realizo un movimiento inesperado y arriesgado. La maniobra, exitosa en términos de seguridad, exigió un esfuerzo extremo que derivó en daños sobre un eje central del sistema de gobierno del propulsor azimutal de la banda de babor, luego de que la embarcación se apoyara contra el veril del canal.
“Nuestra prioridad, incluso en escenarios críticos, es siempre la seguridad del buque remolcado”, subrayó Sergio Di Napoli, titular de la firma Remolcadores Mar del Plata, en referencia a la operación que salvó a la nave asistida de consecuencias mayores.
Tras permanecer amarrado en la Base Naval Mar del Plata, el Remarsa I presenta en su obra viva las huellas naturales del reposo prolongado: incrustaciones y desarrollo de flora marina típica, a pesar del eficiente desempeño de su recubrimiento antifouling por mas de 2 años. La actual puesta en dique seco permitió no solo la reparación mecánica principal, sino también la ejecución de un carenado integral que devolverá a la unidad su condición óptima de navegabilidad y eficiencia hidrodinámica.
Si los plazos técnicos se cumplen, el miércoles el Remarsa I volverá a flotar, listo para reincorporarse al servicio activo en el puerto local. Su retorno se enmarca en un momento de fortalecimiento de la flota de Remolcadores Mar del Plata, que recientemente incorporó el moderno V.B. Austral, sumándose al histórico Tornado. Con estas tres plataformas operativas, la compañía recupera su capacidad plena para atender maniobras de traslado, remolque y operaciones tanto dentro como fuera del espejo de agua portuario.


La actual dotación, compuesta por quince tripulantes de acreditada experiencia y formación especializada, opera bajo un esquema de rotación diseñado para garantizar la continuidad del servicio y la plena disponibilidad operativa de cada unidad de la flota. Con el retorno del Remarsa I a las maniobras, Remolcadores Mar del Plata no solo consolida su fortaleza técnica, sino que reafirma un compromiso irrestricto con la seguridad marítima y la excelencia en la prestación de servicios portuarios. Su alcance abarca la asistencia a buques pesqueros, portacontenedores, cargueros de granel y unidades de apoyo logístico para operaciones sísmicas vinculadas al desarrollo offshore. En el corto plazo, esta capacidad se pondrá de manifiesto en el apoyo al portacontenedores que, en el marco del inicio de actividades de Lamb Weston, establecerá recaladas regulares en el puerto local, sumando un nuevo capítulo en la proyección operativa de la empresa.