La apertura en la mañana de hoy del primer Foro PescAR 2025 fue el punto de partida y reunión del encuentro sectorial en Puerto Madryn. Cerca de 300 personas en el salón principal de conferencias y reuniones del Rayentray Grand Hotel, donde se expusieron con claridad los desafíos y oportunidades que enfrenta la industria pesquera argentina. A pesar de ciertos inconvenientes logísticos, como problemas de audio y el retraso en la llegada del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, la jornada transcurrió con disertaciones de alto nivel que abordaron cuestiones clave para el sector y dejaron de manifiesto la importancia de este evento.
La apertura del mismo, estuvo a cargo del intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre, quien, con una destacada claridad de conceptos y un profundo conocimiento político de cómo salir de eventos puntuales adversos como los actuales, con un fuerte deterioro de rentabilidad manifiesta, logró sortear los inconvenientes técnicos iniciales y dejar un inicio del evento con un trazado de ideas claras, concretas y contundentes.
En su intervención, destacó la capacidad del sector para afrontar adversidades, enfatizando que estas experiencias fortalecen el camino hacia un futuro más sostenible, sustentable y eficiente. La pesca saldrá de esta situación fortalecida, siempre con la esperanza de un futuro mejor.
Posteriormente, el Subsecretario de Recursos Acuícolas y Pesca de la Nación, Med.Vet. Juan Antonio López Cazorla, con su estilo; tomó la palabra para analizar y presentar los beneficios de la estabilidad en la actividad gracias al impacto de la cuotificación de la merluza hubbsi implementada en 2009, señalando que dicha medida logró la estabilidad deseada en la pesca de esta especie clave para el caladero argentino, » algo que esta administración pudo continuar y resolver durante el primer año de gestión «.
Asimismo, abordó la importancia de la administración pesquera, con organismos destacados como la Dirección de Coordinación y Fiscalización Pesquera, donde después de presentar al futuro integrante de la Dirección Nacional, anticipó que están en marcha casi un centenar de tablets, instrumento electrónico que permitirá controlar y fiscalizar las descargas de cada buque, y su correspondiente parte de pesca, durante su operación en el muelle de Mar del Plata.
El Subsecretario adelantó que durante el mes de marzo se hará la presentación en nuestra ciudad, como caso testigo, y en función de ello, completar a todos los puertos del litoral marítimo argentino. Destacó además, la importancia en la gestión de los recursos vivos del mar argentino con fines comerciales, donde, el Consejo Federal Pesquero y el INIDEP, -como organismo rector de la biología marina que brinda certezas sobre el estado de cada pesquería-, son instrumentos para la mejor calidad de la administración pesquera.
Planteó su posición respecto al límite de la milla 200, citando la reciente intervención de la autoridad marítima ante un buque furtivo, el XinRun 579 cuya bandera de Vanuatu sorprendió, por ser de conveniencia, que incursionó ilegalmente en aguas argentinas a principios de 2025. Se destacó la figura de la Prefectura Naval Argentina que con monitoreo satelital y elementos electrónicos de última generación hicieron posible una presentación formal frente a la in fraganti violación de espacios soberanos argentinos y su consecuente violación a la Ley Federal de Pesca 24.922.
El encuentro contó además con un panel de referentes del sector empresarial, las exposiciones de Eduardo Boiero, Darío Sócrate y Diego García Luchetti, quienes brindaron una visión integral de la situación actual del sector.
Boiero, representando la flota congeladora mayor, expresó su preocupación por la rentabilidad de las exportaciones, afectadas por la inflación en dólares, el cepo cambiario y el aumento constante de costos. «No hablamos de atraso cambiario porque el gobierno se pone nervioso. Tenemos inflación en dólares «, fue el prefacio del presidente de la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPeCA).
Socrate, por su parte, resaltó la demanda sostenida y precios del calamar en el mercado internacional, como la disponibilidad en el rico mar argentino, aunque advirtió sobre el impacto de eventuales fluctuaciones de precios y costos operativos, un ratio que hoy aún goza de valores positivos, pero ante la escalada de costos del último año y medio, cualquier caída de precios, podría llevar al sector que representa, a un estado similar y preocupante como es el del langostino. Donde los costos muchas veces superan la producción.
«El buen momento del calamar puede derrumbarse si aparecen capturas fuera de nuestra zona de pesca que derrumbe los precios y ahí viviríamos la misma situación crítica que el resto de los sectores«, sentenció el presidente de la Cámara de Armadores Poteros Argentinos (CAPA).
Por su parte, García Luchetti, en tanto, se refirió a la compleja situación que atraviesa el sector de la merluza, caracterizándose como crítica y alertando que «los números en esta actividad, no dan«.
«Un barco fresquero pierde 10.000/20.000 por marea y un exportador en Mar del Plata pierde 500 dólares por cada tonelada que exporta a Brasil a partir de la caída de precios internacionales y la devaluación del Real «, informó el presidente de la Cámara de Armadores de Buques Pesqueros Argentinos, (CAABPA) ante el público presente.
En cuanto a la pesca fuera de la milla 200, Sócrate alertó sobre la preocupante actividad de más de 400 buques extranjeros que operan sin regulación efectiva y con prácticas desleales, amparados en banderas de conveniencia. Ante esta problemática, propuso un mayor control internacional mediante regulaciones de la FAO o Naciones Unidas para equiparar las normativas aplicadas en Argentina con las que rigen en alta mar.
Sobre la necesidad de optimizar la gestión administrativa, Sócrate fue tajante en su crítica a la burocracia estatal, solicitando mayor coordinación y ponerse de acuerdo entre organismos como SENASA, Pesca Nación, Aduana y otros entes regulatorios, para evitar duplicidad de trámites que afectan la operatividad y el dinamismo administrativo del sector.
Por último, se abordó la cuestión de la trazabilidad y certificación de productos pesqueros. En este punto, se coincidió en que su implementación es inevitable, destacando que » no es para obtener un mejor precio sino que ya es requisito necesario para poder acceder a los mercados de consumo «, para garantizar la permanencia en los mercados internacionales, aunque no constituya un factor determinante para la actividad fuera de la Zona Económica Exclusiva Argentina.
En el inicio del encuentro de la pesca argentina en Puerto Madryn dejó en claro la necesidad de una agenda estratégica para el sector, con políticas que fomenten la sostenibilidad, la competitividad y el ordenamiento de la actividad pesquera tanto dentro como fuera de la milla 200. La articulación entre el Estado y los actores del sector será fundamental para encauzar soluciones que garanticen el desarrollo a largo plazo de esta actividad clave para la economía del país.
Quedó mucho material que iremos informando en posteriores notas, con figuras de alto nivel y claridad de conceptos, que puedan dar luz, ante la bruma que atraviesa el sector en momentos poco propicios para la inversión y el crecimiento sostenido.
