En junio, Argentina registr贸 el d茅ficit comercial m谩s alto para ese mes desde que se tiene registro, y el primer semestre culmin贸 con el peor resultado de los 煤ltimos cinco a帽os. Este saldo negativo es el reflejo del fuerte impacto de la sequ铆a en las exportaciones agr铆colas, que no pudo ser compensado por el endurecimiento del cepo importador. La salida de d贸lares por esta v铆a anticipa un aumento en la escasez y representa una mala noticia para las empresas industriales, un sector que esta semana volvi贸 a reclamar por las restricciones de acceso a divisas y su efecto en la actividad econ贸mica.
Seg煤n el Instituto Nacional de Estad铆sticas y Censos (Indec), las exportaciones de bienes totalizaron US$5.540 millones en junio, lo que represent贸 una ca铆da del 34,5% en comparaci贸n con el mismo mes del a帽o anterior. Asimismo, las importaciones alcanzaron los US$7.177 millones con una disminuci贸n del 17,2% en relaci贸n al mismo per铆odo del a帽o pasado.
El jefe de research de Romano Group, Salvador Vitelli, coment贸 que la balanza comercial termin贸 con un d茅ficit de US$1.727 millones y cerr贸 el peor junio desde que se tiene registro. Adem谩s, el economista precis贸 que el rojo acumulado en el primer semestre fue de US$4.400 millones, la cifra m谩s alta desde 2018, cuando hab铆a sido de US$4.890 millones.
Estas cifras indican una preocupante situaci贸n econ贸mica para el pa铆s, afectada por la sequ铆a en el sector agr铆cola y las restricciones en el comercio internacional, lo que puede tener repercusiones negativas para las empresas industriales y la econom铆a en general. Ver Datos oficiales del INDEC del informe Intercambio Comercial Argentino. Cifras estimadas de junio de 2023.

鈥En el primer semestre de 2023, el d茅ficit acumulado asciende a US$4.400 millones que contrasta con el super谩vit de US$3.000 millones alcanzado en los primeros 6 meses de 2022. En total, los ingresos netos por exportaciones acumulan una ca铆da de US$7.000 millones鈥.
鈥Un aspecto a destacar es que finalizado el tercer tramo del d贸lar diferenciado para la exportaci贸n de alimentos, indudablemente bajaron tanto los stocks como los incentivos a exportar, y en la medida que nos acercamos a las elecciones, el sector privado prefiere no desprenderse de un stock que cotiza en d贸lares. Sin embargo, la ca铆da no es solamente por los alimentos, sino que es generalizada en todos los rubros鈥.
La mayor ca铆da en las exportaciones de junio se registraron en combustibles y energ铆a, con una contracci贸n del 37,7% interanual. Le siguieron los productos primarios, con un desplome del 36,7% en valor y en 34,1% en cantidades contra el mismo mes del a帽o pasado. 鈥En su interior, los cereales se contrajeron un 39,4% anual, mientras que las semillas y los frutos oleaginosos mostraron una retracci贸n de 35,2% 鈥, detallaron desde la consultora Abeceb.
En cuanto a las importaciones, acotaron que 鈥una nota importante es que casi todas las ca铆das de importaciones son principalmente por precio, a excepci贸n de los combustibles y los bienes de capital, lo que preocupa dado que ello implica que el pa铆s no cuenta con los d贸lares suficientes para reponer el desgaste natural del capital productivo鈥.

Grave y sabido en el sector pesquero, que desde hace algo m谩s de 10 meses numerosa cantidad de barcos han tenido que estar parados en el muelle esperando la aprobaci贸n de SIMI o SIRA, algo vergonzoso para un sector pujante y din谩mico, adem谩s de superavitario como el pesquero. Algo que evidentemente las 芦autoridades de escritorio禄, a煤n no han comprendido de un sector generador de mano de obra calificada por excelencia.
destacaron que los efectos de las crecientes restricciones sobre el mercado de cambios tuvieron impacto en el entramado productivo. La actividad sectorial se sostuvo en niveles relativamente aceptables durante la primera parte del 2023 gracias a sectores como el automotriz e hidrocarbur铆fero, por el boom de Vaca Muerta, que compensaron a los rubros afectados por la seca como la molienda.
鈥La escasez de divisas y las tensiones en el marco de la renegociaci贸n con el FMI derivan en una creciente incertidumbre en el mercado cambiario donde se profundizan los problemas producto de las restricciones en el pago de servicios cr铆ticos para la producci贸n y la log铆stica internacional 鈥.
En este marco, la actividad pesquera intenta navegar contra la corriente, ante un mundo en problemas, con mercados mundiales del consumo readapt谩ndose a las nuevas contracciones debido a la ca铆da del poder adquisitivo de las familias en los principales centros de consumo y con un mercado argentino, donde los costos espiralizan al alza indexados por inflaci贸n y anclados con un tipo de cambio no competitivo; donde adem谩s, se exporta por el oficial menos retenciones m谩s aranceles de acceso a los mercados mundiales; y se pagan a proveedores internos con d贸lar blue m谩s una alta tasa de riesgo por la grave incertidumbre que generan las expectativas electorales. En este sentido, se dispararon los costos, y desaparecieron rentabilidades, tornando a las empresas en un alto grado de imprevisibilidad, que veremos hasta cuanto aguanta el sistema.









